Vida
Pérdida de visión: la próxima pandemia

Los ojos humanos son nuestras ventanas al mundo, pero cada vez durarán menos con salud, debido al uso y abuso de las pantallas.
Ya se ha convertido en pura normalidad el uso de teléfonos móviles inteligentes, computadoras, tabletas y otros dispositivos con pantallas de gran definición y brillo. Actualmente, un adulto pasa de media más de siete horas al día frente a las pantallas, sea trabajando o simplemente por ocio.
Ese esfuerzo visual recae sobre la retina, haciendo que las células foto-receptoras (conos y bastones) disminuyan su vida útil. De este modo, se pierde visión periférica y de profundidad, y se daña el campo visual. Además, también pueden producirse problemas en la hidratación del ojo y otros males como las queratosis, conjuntivitis, aceleración de algunos tipos de glaucoma y el aumento en los grados de miopía, con una evolución más rápida que antes.
¿Cómo puedo saber si estoy perdiendo vista? Visión borrosa aun cuando usamos lágrimas artificiales, aparición de moscas o arañas en el campo visual, dificultad para enfocar y leer textos que antes nos resultaban fáciles, necesidad de poner las letras en mayor tamaño, cefalea frontal y occipital que tiende a confundirse con migraña, párpados hinchados, ojos rojos con sensación de picor, aparición de arrugas en el entrecejo por hacer gestos para ver mejor o colores menos vivos.
Es impresionante la cantidad de niños que ya presentan problemas visuales por el uso excesivo de pantallas, así como el gran aumento en la progresión de enfermedades visuales como la retinosis y los problemas de atrofia del nervio óptico.
¿Cómo puedo mejorar mi salud visual?
Un aporte de vitamina del complejo B, específicamente B12 y B6, es indispensable para el correcto mantenimiento del nervio óptico. Además de la vitamina A o retinol y la E, que funcionan como regenerante y antioxidante; minerales indispensables para el correcto metabolismo del ojo, como el zinc, el magnesio, el silicio, el cobre, y disminuir las horas de exposición a pantallas a no más de dos o tres horas al día.
También tenemos la medicina verde: plantas como manzanilla, santolina, arándanos, zanahoria, aciano, pepino, saúco, luteína, té verde, ajo, cebolla y cayena, entre muchas más. No es necesario tomarlas todas, pero sí sería bueno incluirlas en nuestra dieta.
Ah, y no descuidar la vigilancia sobre otras enfermedades, como la hipertensión y la diabetes, que en muchas ocasiones comienzan a manifestarse por la vista. Lo mejor es prevenir y valorarse periódicamente con el médico.
Nacionales
Especialista recomienda estimular la actividad física desde el gateo para un desarrollo integral en la primera infancia

Francisco Salvador Erazo, médico especialista en primera infancia del Ministerio de Salud (Minsal), destacó la importancia de iniciar rutinas para fortalecer el desarrollo psicomotor de los bebés desde que comienzan a gatear, es decir, antes de cumplir un año.
Para los menores de un año, Erazo recomendó colocar a los bebés en posición prona (boca abajo) al menos 30 minutos diarios, distribuidos en diferentes momentos, para fortalecer músculos del cuello y la espalda y así promover el gateo. Además, aconsejó evitar que los pequeños pasen más de una hora inmovilizados en hamacas o columpios.
En niños de uno a tres años, el especialista indicó que deben realizar actividades físicas durante tres horas diarias distribuidas a lo largo del día, enfatizando ejercicios que estimulen la marcha, como caminar con ayuda de los padres o arrastrar objetos. A partir de los dos años, se pueden incorporar juegos que impliquen tirar pelotas, atravesar obstáculos, correr, bailar y brincar, con el objetivo de mejorar la coordinación óculo-motora y la lateralidad.
El especialista explicó que la coordinación óculo-motora permite que el niño pueda realizar actividades combinando la vista y el movimiento, como lanzar una pelota sin necesidad de observarla directamente, lo que contribuye al desarrollo psicomotor integral.
Erazo destacó que a partir de los tres años, se recomienda que los niños realicen al menos tres horas de actividad física al día, incluyendo 30 minutos de ejercicio intenso, lo cual favorecerá su salud, autoestima y prevenirá el sobrepeso.
Ante la preocupación de falta de espacios para jugar, el especialista aclaró que no es un impedimento para estimular la actividad física en casa, dando como ejemplo a Ivania de Lagos, madre primeriza que ha convertido la sala de su vivienda en un área de juegos para su hijo Miguel, de dos años.
Ivania relató que cada mañana dedica tiempo para que Miguel realice actividades como jugar con burbujas, escalar en una estructura y bailar, promoviendo un estilo de vida saludable desde temprana edad. Además, resaltó la importancia de la lactancia materna, y agradeció la implementación de salas de lactancia materna en lugares públicos como el Aeropuerto Internacional de El Salvador.
Finalmente, la madre valoró las leyes Nacer con Cariño y Crecer Juntos, impulsadas por la primera dama Gabriela de Bukele, que promueven el bienestar integral de la niñez y las familias salvadoreñas. «Deseo que estas iniciativas lleguen a todas las familias para que más niños crezcan saludables y con amor», afirmó.
Principal
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Internacionales
Estados Unidos aprueba nuevo tratamiento inyectable para prevenir el VIH

La farmacéutica Gilead anunció este miércoles la aprobación en Estados Unidos de Yeztugo, un innovador tratamiento para la prevención del VIH que consiste en dos inyecciones al año. Este avance podría transformar la lucha contra el Virus de Inmunodeficiencia Humana y el sida, al ofrecer una alternativa a los medicamentos orales que requieren toma diaria.
Yeztugo está dirigido a adultos y adolescentes con un peso mínimo de 35 kg y se basa en la molécula lenacapavir, la misma que Gilead emplea en su tratamiento antirretroviral Sunlenca, lanzado en 2022.
Daniel O’Day, presidente y CEO de Gilead, calificó la aprobación como “un día histórico” para la prevención del VIH, destacando la eficacia sin precedentes que este medicamento promete.
No obstante, el costo del tratamiento podría limitar su acceso, ya que aunque Gilead no ha revelado precios oficiales, analistas estiman que el costo anual en Estados Unidos podría rondar los 25,000 dólares. Por ello, expertos y organizaciones internacionales han pedido al laboratorio facilitar la producción de versiones genéricas para ampliar el acceso en países de bajos recursos.