Internacionales
Mujer de 85 años asesino a su hijo con discapacidad porque ya no lo podía cuidar
Una mujer, de 85 años, fue denunciada por el delito de asesinato con alevosía luego de matar a su hijo discapacitado, que se encontraba postrado en cama, según informó El País.
María Luisa Martínez Barranco molió unas 160 pastillas, desde Ibuprofeno hasta Tramadol o Urbason, y lo repartió en dos vasos con líquidos que se bebieron ella y su hijo con discapacidad.
Una de sus hijas llegó luego de unas horas a la vivienda donde se encontraban y de inmediato los trasladó al Hospital Príncipe de Asturias de Alcalá de Henares, donde los médicos informaron la muerte del hijo como consecuencia de la hemorragia cerebral que le causó la ingesta de los medicamentos, mientras que María Luisa sobrevivió.
Según el escrito del ministerio fiscal español, el 26 de noviembre de 2015 Martínez Barranco mató a su hijo, de 64 años, en Torres de la Alameda «declarado judicialmente discapaz total», quien dependía de forma completa de su madre por sufrir una minusvalía mental, falta de movilidad, era ciego, sordo y mudo.
El Ministerio Público de España libró de la prisión a Martínez Barranco indicando que “con sus facultades volitivas y cognitivas gravemente afectadas, debido al empeoramiento de su estado de salud a consecuencia de su avanzada edad, la acusada tomó esa decisión al verse mermada en sus capacidades para continuar cuidando a su hijo y para evitar que sus otros hijos -uno, de 59, también con una discapacidad- tuvieran que asumir la carga futura cuando ella faltase”.
De esta forma, la mujer evita la pena de seis años de prisión y otros tantos de internamiento en centro médico que solicitaba la Fiscalía y en su lugar se le impone la medida de libertad vigilada, con obligación de someterse a tratamiento psiquiátrico externo durante seis años, es decir, sin ingresar en centro alguno. (La República)
Internacionales
Maduro se autoproclama “Arquitecto de la Paz” en acto oficial y desata críticas en redes sociales
En un acto oficial organizado por la Sociedad Bolivariana de Venezuela, el presidente Nicolás Maduro se autoproclamó “Arquitecto de la Paz”, un título que incluyó la entrega de una medalla durante una ceremonia frente a simpatizantes chavistas. El evento fue difundido por medios oficiales y a través de redes sociales.
La actividad generó reacciones críticas y comentarios sarcásticos en plataformas digitales, donde usuarios cuestionaron el significado del reconocimiento, al considerar que se trata de una distinción autoimpuesta en medio de la compleja situación que atraviesa el país. La autoproclamación se produce en un contexto marcado por una prolongada crisis social, política y económica en Venezuela.
Durante la ceremonia, Maduro exhibió la medalla mientras era aplaudido por los asistentes. Diversos sectores interpretaron el acto como una estrategia de comunicación política, especialmente por la coincidencia temporal con un hecho de alto impacto internacional: la reciente entrega del Premio Nobel de la Paz 2025 a la líder opositora María Corina Machado en Oslo, Noruega.
El contraste entre ambos eventos ha sido ampliamente señalado en redes sociales y por analistas políticos. Mientras Machado recibió el galardón en un acto organizado por el Comité Nobel, el reconocimiento a Maduro fue otorgado en un evento promovido por organizaciones afines al oficialismo venezolano.
La autoproclamación también ocurre en un escenario en el que Venezuela enfrenta elevados niveles de inflación, dificultades en el acceso a alimentos y medicinas, un sostenido flujo migratorio y denuncias de organismos internacionales sobre violaciones a los derechos humanos, incluyendo detenciones de opositores políticos.
En redes sociales, numerosos usuarios calificaron el título de “Arquitecto de la Paz” como un gesto simbólico que busca reforzar la narrativa oficial del Gobierno, mientras persisten los desafíos estructurales del país. Otros señalaron que el acto coincide con versiones sobre tensiones internacionales y supuestos escenarios de presión externa, lo que habría motivado al mandatario a insistir en un discurso de estabilidad y resistencia.
Por su parte, sectores de la oposición y analistas sostienen que el reconocimiento carece de legitimidad y responde a una estrategia de autopromoción política, en contraste con el reconocimiento internacional otorgado a Machado. El episodio ha reavivado el debate sobre la imagen del Gobierno venezolano en el exterior y la profunda división política que persiste en el país
Internacionales
Paralizan algunas operaciones en el Aeropuerto de La Aurora, Guatemala debido a la neblina
Algunas operaciones se paralizaron en el aeropuerto de La Aurora, Guatemala, debido a la presencia de neblina que redujo significativamente la visibilidad.
Durante la madrugada de hoy jueves se ordenó la suspensión momentánea de los despegues, reportándose el último a las 6:00 de la mañana.
La medida tuvo una duración de aproximadamente dos horas y media y provocó retrasos en vuelos y otros inconvenientes.
Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC) instruyó a los pasajeros que se comunicaran directamente son las líneas aéreas para reprogramar cambios en los itinerarios.
Seis vuelos no pudieron aterrizar en La Aurora debido a las condiciones climáticas y fueron enviados a un aeropuerto alterno.
Internacionales
Condenan a cadena perpetua a anestesiólogo que envenenó a 30 pacientes
En uno de los mayores casos de negligencia médica en la historia de Francia, un anestesiólogo fue condenado a cadena perpetua por envenenar de forma intencional a 30 pacientes, 12 de ellos mortalmente.
Se trata de Frédéric Péchier, de 53 años, quien fue declarado culpable al final de un juicio de cuatro meses en la ciudad de Besançon, en el este de Francia.
Las investigaciones determinaron que Péchier introdujo sustancias químicas, como cloruro de potasio o adrenalina, en las bolsas de suero de los pacientes.
Su víctima más joven, un niño de 4 años, sobrevivió a dos paros cardíacos durante una operación de amígdalas de rutina en 2016. La víctima de mayor edad tenía 89 años.
Los productos químicos que Péchier añadió provocaron paros cardíacos o hemorragias en los pacientes, lo que requirió intervenciones de emergencia en el quirófano.
A menudo, el propio Péchier realizaba esas intervenciones y se presentaba como el salvador de los pacientes. Pero en 12 casos no pudo participar o ya era demasiado tarde, así que los pacientes fallecieron.










