Judicial
Cárcel para pandilleros que exigieron $5,000 a comerciante en Chalatenango

Imagen de referencia
El Tribunal de Sentencia de Chalatenango, luego de escuchar las pruebas de cargo y descargo, condenó a 20 años de prisión a cuatro supuestos pandilleros por el delito de extorsión agravada.
Los condenados son: Julio Adalberto Huezo Portillo, de 38 años de edad; Roberto Carlos Lemus, de 20; José Orlando Pineda Vásquez, de 22, y Herberth Alonso Huezo Portillo, de 39.
Consta en el proceso que, los hechos ocurrieron en el municipio de La Reina, departamento de Chalatenango, desde junio de 2019 cuando los sujetos llegaron al negocio de su víctima para exigirle $2 mil dólares a cambio de no atentar contra su vida o la de sus parientes más cercanos. La víctima entregó el dinero.
Un mes después, los pandilleros volvieron donde su víctima para pedirle $1,000 dólares, siempre bajo amenazas de muerte. Nuevamente la víctima entregó el dinero por temor a que los pandilleros cumplieran sus amenazas.
En agosto de ese mismo año, los sujetos interceptaron al comerciante para exigirle esta vez $5,000 dólares, pero este les dijo que no andaba dinero; por lo tanto, los pandilleros le dijeron que llegarían a su casa en unos días.
Ante esto, la víctima interpuso la denuncia en la Policía Nacional Civil (PNC), cuyos agentes montaron un dispositivo para arrestar en flagrancia a los sujetos que llegaron el 19 de agosto a recoger los $5,000 dólares.
A los ahora condenados se les decomisó el paquete que contenía billetes debidamente seriados. En el juicio los cuatro fueron debidamente individualizados.
Judicial
Localizan restos de joven desaparecido en 2020; pandilleros enfrentan juicio por el crimen

La Fiscalía General de la República (FGR) informó este miércoles que, en coordinación con la Policía Nacional Civil (PNC), localizaron restos humanos en un cementerio clandestino ubicado en el municipio de Nuevo Cuscatlán, departamento de La Libertad.
Según las autoridades, los restos corresponden a un joven de 24 años que fue privado de libertad en abril de 2020 y posteriormente asesinado por miembros de la Mara Salvatrucha (MS-13), específicamente de las clicas Teclas Locos Salvatruchos (TLS) y Ayagualos Locos Salvatruchos.
Los presuntos responsables ya enfrentan juicio por este hecho. El procedimiento de exhumación fue autorizado por el Tribunal Quinto Contra el Crimen Organizado de San Salvador. Fiscales y agentes policiales continúan trabajando en el sitio para recolectar evidencia que respalde el proceso judicial.
La localización del cuerpo fue posible gracias a diligencias de investigación desarrolladas como parte del combate a estructuras criminales.