La infante, que en agosto cumple tres años, está bajo la protección de su madre, pero siempre está preguntando por su padre.

Julián Elías Martínez Ayala, de 25 años de edad y empleado del call center Telus, desapareció hace casi cuatro meses. Desde entonces, su hija de dos años constantemente pregunta por él y ha dicho a su familia que su papá ha llegado a visitarla. 

«Mi papá vino y me hizo cosquillas», relató la niña a una de sus abuelas hace algunos días y dejó helada a toda la familia que aún espera noticias del joven y no pierde la fe de encontrarlo con vida. 

Una de las hermanas de Martínez contó a El Salvador Times que la niña incluso le ha pedido a su abuela, la madre del joven, que la lleve a ver a su padre, a quien no ha visto desde el pasado 9 de enero cuando salió para su trabajo. De hecho, en el estacionamiento de Telus fue la última vez que alguien dice haberlo visto. Su paradero, por ahora, sigue siendo un enigma. 

La infante, que en agosto cumple tres años, está bajo la protección de su madre, pero siempre está preguntando por su padre.

La hermana de Martínez aseguró que el joven cumple cuatro meses de desaparecido el próximo jueves 9 de mayo y expresa sutilmente que en todo este tiempo trascurrido, ha sido un dolor inmenso no tenerlo en la casa. Recalca que el cuarto donde dormía está intacto como lo dejó, incluso con su ropa y accesorios. 

Sin embargo, la hermana de Martínez sostiene que no solo su sobrina es la que ha visto al joven, pues ella también ha soñado con él. 

«El sábado anterior soñé que regresaba a la casa, yo le preguntaba dónde había estado y él me decía que me esperara que ya iba a llegar. Lo vi que estaba sentado, y me dijo: ‘Tranquila, si yo ya voy a venir, tené paciencia'», sostuvo.

Ella asocia ese sueño a su fuerte deseo de que su hermano regrese pronto, pues se aferra a la esperanza y a la fe de que el joven un día regrese a casa. 

Búsqueda en todos los hospitales

La familiar de Martínez asegura que han andado buscando a su hermano en casi todos los hospitales del país, porque guarda la esperanza de que pueda estar hospitalizado en alguno de ellos.

Dice que un día alguien se contactó con ella a través de redes sociales, y le dijeron que un joven de una edad similar a la de su hermano se encontraba sin identificar en el hospital San Juan de Dios de Santa Ana. Aunque ya se hicieron presentes al lugar, aún no le han dado información certera de este joven.

Sin embargo, esa información les ha dado una nueva ilusión en que volverán a ver a su familiar. 

En cuanto a las investigaciones sobre el paradero del joven, la joven asegura que la Policía no tiene pistas de su desaparición, pese a que se han realizado varias entrevistas a los amigos y compañeros de trabajo.

Asimismo, relata que tuvo que cambiar el número celular porque recibía llamadas ofensivas y hasta amenazantes. «Un día alguien me llamó y me dijo que ya no lo buscara porque ya estaba enterrado. A raíz de esa situación hasta eliminé el Whatsapp y aún así me seguían enviando mensajes de texto ofensivos», lamentó la joven. 

Por ahora, tiene su fe puesta en el joven que se encuentra hospitalizado en Santa Ana.  

Nota tomada de El Salvador Times