Preocupado por el imparable avance de la inteligencia artificial, el secretario general de la ONU, António Guterres, anunció la composición del grupo consultivo multilateral que hará propuestas para la gobernanza de estas nuevas tecnologías destinada a maximizar sus beneficios y disminuir sus riesgos.

El «potencial transformador de la IA para el bien es difícil incluso de imaginar», en particular para las economías en desarrollo, que podrían hacer una elipsis tecnológica y llevar «los servicios directamente a las personas (…) que más los necesitan», dijo Guterres.

Pero también lo son los potenciales riesgos, en particular en el campo de la desinformación, el asentamiento de los prejuicios y la discriminación, la vigilancia y la invasión de la privacidad o el fraude, advirtió.

La IA puede igualmente «socavar la confianza en las instituciones, debilitar la cohesión social y amenazar la propia democracia», recordó.

Para el secretario general, otro riesgo de la IA, que hasta ahora se «concentra en un puñado» de países, es que «agrave las desigualdades mundiales y convierta las brechas digitales en abismos».

Recordó haber tenido una «experiencia surrealista» al verse a sí mismo hablando en perfecto chino pese a que no sabe una palabra de este idioma.

Este ejemplo da una idea de las «increíbles posibilidades» y de los «peligros potenciales» de la IA, subrayó.

«Todo dependerá de si las tecnologías de IA se utilizan de forma responsable y sean accesibles para todos», dijo Guterres, que en otras ocasiones ha urgido a los estados miembros de la ONU a crear barreras de seguridad para controlar estas nuevas tecnologías, como se hace en sectores como la energía atómica.

El grupo consultivo, integrado por personas expertas de todo el mundo en ámbitos como la administración pública, la empresa, la comunidad tecnológica, la sociedad civil y el mundo académico, de diversas edades, será el «punto de partida», señaló.

Se encargará de estudiar cómo vincular las diversas iniciativas de control de la IA que ya están en marcha para formular recomendaciones en los ámbitos de la gobernanza internacional de la IA; una comprensión compartida de los riesgos y desafíos y oportunidades, con el fin de acelerar la consecución de los Objetivos de Desarrollo (ODS).

Las recomendaciones servirán de base para los trabajos de la Cumbre del Futuro, que tendrá lugar en septiembre de 2024 y para las negociaciones en torno a la propuesta de un Pacto Mundial Digital, señaló Guterres.