Internacionales
Revelan video de momentos antes de que una mujer fuera asesinada en su apartamento en Manhattan

Una mujer de la ciudad de Nueva York, que acababa de llegar a casa después de una noche de fiesta el sábado por la noche, fue seguida hasta su edificio de apartamentos donde un vagabundo la mató a puñaladas, según informó la policía.
El domingo por la mañana Christina Yuna Lee, de 35 años de edad, llegó al edificio en donde vivía en Chrystie Street en Chinatown según dijo la policía a WNBC.
Un nuevo video de vigilancia reveló que un hombre la siguió al edificio, según dijo a WNBC su casero, Brian Chin. “Ella abrió la puerta y él entró justo detrás de ella. Ella nunca supo que él estaba allí”.
A las 4:23 am, los oficiales del Departamento de Policía de la ciudad de Nueva York respondieron a una llamada sobre una disputa en el edificio, dijo el sargento portavoz, Edward Riley, en un comunicado.
Dos mujeres jóvenes aterrorizadas al otro lado del pasillo de Lee escucharon sus gritos y llamaron al 911, informó WNBC. “Al llegar, la policía se encontró con un individuo atrincherado y no pudo acceder de inmediato al interior del apartamento”, dijo Riley.

Cuando los oficiales finalmente pudieron ingresar al departamento con la ayuda de los oficiales de la Unidad de Servicios de Emergencia, encontraron a Lee en el baño “con un trauma en el cuerpo”, dijo Riley.
Christina Yuna Lee fue declarada muerta en la escena.
Los oficiales dijeron que atraparon al sospechoso, Assamad Nash, de 25 años, quien supuestamente trató de escapar saltando por una escalera de incendios y luego corriendo dentro del apartamento y escondiéndose debajo de una cama, informó el New York Times.
El New York Post pudo obtener el escalofriante video de vigilancia, que describió como que mostraba al sospechoso caminando a unos 6 pies de Lee dentro de un pasillo estrecho mientras se dirigía a su apartamento.
Nash había sido arrestado anteriormente por una serie de delitos menores, según los registros judiciales citados por The New York Times. En un incidente, un hombre de 62 años supuestamente dijo que Nash lo había golpeado en la cara por una disputa de MetroCard.
Lee era productora creativa sénior en Splice, una plataforma de música digital en la ciudad de Nueva York, según su perfil de LinkedIn.
Se había descrito a sí misma en LinkedIn como una “productora digital experimentada con un historial demostrado de trabajo en las industrias minorista, moda, fitness, medios, arte y música”.
Graduada de la Universidad de Rutgers, dijo que era una “fuerte profesional de las artes y el diseño con una licenciatura enfocada en Historia del Arte”.

El asesinato de Lee es uno de varios ataques contra los estadounidenses de origen asiático en los últimos años.
Calificando el asesinato de “horrible” el domingo, el alcalde Eric Adams dejo en un tuit que “hoy apoyamos a nuestra comunidad asiática”.
Internacionales
Embarazada resulta lesionada en intento de asalto en Ciudad de Guatemala

Una mujer embarazada de seis meses resultó herida de bala tras un intento de asalto registrado en la zona 9 de la Ciudad de Guatemala, según informó la Policía Nacional Civil (PNC).
El hecho ocurrió en la intersección de la 6ª avenida y 8ª calle, donde sujetos armados habrían interceptado a la víctima con intenciones de robo. La mujer fue identificada como Jimena Vickers, de 31 años, quien se desempeña como visitadora médica.
De acuerdo con versiones preliminares, los atacantes abrieron fuego luego de que Vickers se opusiera al asalto. En el parabrisas del vehículo, del lado del conductor, se observaron al menos tres impactos de bala.
La víctima fue auxiliada por cuerpos de socorro y trasladada a un centro asistencial. Su estado de salud, así como el del bebé que espera, no ha sido detallado por las autoridades.
La PNC inició un operativo en el sector para dar con los responsables, aunque hasta el momento no se reportan capturas.
Internacionales
Crisis humanitaria en Gaza deja a niños y madres gravemente afectados por la desnutrición en medio del conflicto

La organización Médicos Sin Fronteras (MSF) alertó este viernes que uno de cada cuatro niños entre seis meses y cinco años, así como mujeres embarazadas y lactantes atendidos en sus clínicas en Gaza, presenta signos de desnutrición, en lo que califican como una emergencia sanitaria y humanitaria de alto nivel.
En un comunicado, MSF acusó a las autoridades israelíes de usar deliberadamente el hambre como un arma de guerra. “Los propios pacientes y profesionales de la salud sufren de hambre”, señaló la ONG, que mantiene presencia médica en Ciudad de Gaza.
Caroline Willemen, coordinadora del proyecto de MSF en esa ciudad, aseguró que están recibiendo alrededor de 25 nuevos casos de desnutrición diariamente. Desde el 18 de mayo, los registros se han cuadruplicado y la desnutrición severa en menores de cinco años se ha triplicado.
MSF afirma que esta situación se debe a una “hambruna deliberada”, consecuencia directa del bloqueo impuesto por Israel sobre el enclave palestino. Aunque a finales de mayo se flexibilizó el cerco, las carencias de alimentos, medicinas y productos básicos persisten.
Israel, por su parte, responsabiliza a Hamas de manipular la ayuda humanitaria, acusándolo de apropiarse de suministros para revenderlos a precios desorbitados o de atacar a las personas que esperan recibir alimentos.
La ONG también denunció ataques en los centros de distribución de alimentos gestionados por la Fundación Humanitaria de Gaza (GHF), respaldada por Israel y Estados Unidos. “Estas distribuciones no son ayuda humanitaria, son crímenes de guerra cometidos a plena luz del día bajo el disfraz de compasión”, afirmó Mohammed Abu Mughaisib, coordinador médico adjunto de MSF en Gaza.
La ONU ha documentado más de 1.000 muertes desde finales de mayo en puntos de ayuda humanitaria, la mayoría cerca de los centros operados por la GHF.
Internacionales
Ecuador cierra el semestre más violento desde 2011 con más de 4,500 homicidios

Ecuador cerró el primer semestre de 2025 como el más violento de los últimos 14 años, al registrar 4,557 homicidios, lo que representa un aumento del 45 % respecto al mismo periodo de 2024 y un 22 % más en comparación con los primeros seis meses de 2023, según datos del Ministerio del Interior recopilados por el medio «Primicias».
Del total de muertes violentas, el 89 % (4,069 casos) fue cometido con armas de fuego, incluyendo pistolas, escopetas, ametralladoras y fusiles, lo que evidencia el creciente poder de fuego de los grupos criminales.
Mayo se posicionó como el mes más sangriento desde que se tiene registro, con 915 homicidios, superando incluso los 831 asesinatos ocurridos en octubre de 2023. En promedio, al menos 30 personas fueron asesinadas cada día durante el primer semestre del año. En junio, aunque hubo una leve reducción, se contabilizaron 548 crímenes.
Entre enero y mayo, 70 cantones del país registraron un aumento en muertes violentas respecto al mismo periodo del año anterior. En estos territorios se concentró el 90 % de los homicidios registrados, es decir, un total de 3,578.
Frente a esta escalada de violencia, el gobierno de Daniel Noboa ha decretado estados de excepción en varias provincias —Guayas, Los Ríos, Manabí, Orellana, Santa Elena, El Oro y Sucumbíos—, en dos cantones de Quito y en el sistema penitenciario nacional. Sin embargo, estas medidas han sido insuficientes para frenar la criminalidad.
El más reciente estado de excepción, declarado el 12 de abril mediante el Decreto 599, fue parcialmente aprobado ayer por la Corte Constitucional, que consideró inconstitucional aplicar la medida en todos los centros penitenciarios y en el cantón Camilo Ponce Enríquez (Azuay), al no evidenciarse hechos que justifiquen su inclusión.
Además, la Corte rechazó la suspensión del derecho a reunión, las inspecciones y requisas sin orden judicial, así como la intervención directa de las Fuerzas Armadas, al señalar que estas acciones pueden ejecutarse dentro del marco legal ordinario.
Pese a ello, se mantuvieron restricciones como la suspensión del derecho a la libertad de tránsito, la inviolabilidad del domicilio y el derecho a la correspondencia, permitiendo a la fuerza pública realizar allanamientos y revisar mensajes dirigidos a privados de libertad.
El alto índice de homicidios refleja la profunda crisis de seguridad que atraviesa Ecuador, donde el crimen organizado y las bandas armadas continúan desafiando la capacidad del Estado para contener la violencia.