Un trágico hecho ha conmocionado a la ciudad de Irie, en Pensilvania, luego de que cinco menores de edad, entre los ocho meses y 7 años, murieron en un incendio de una guardería.

De acuerdo con medios estadounidenses, cuatro de los niños son hermanos y sus padres los dejaban en el lugar por la noche desde hace más de un año ya que trabajaban.

Incluso, circula una versión de que el padre de tres de los niños que murieron en el incendio es bombero y, al momento del siniestro, se encontraba atendiendo otra emergencia.

De acuerdo con el portal Infobae, el percance se registró a eso de la 1:15 de la madrugada del domingo y las causas aún no han sido establecidas, pero se confirmó que el lugar cuenta con los permisos para operar.

El medio antes citado agrega que la Oficina de Desarrollo y Aprendizaje infantil hacía revisiones periódicas en el lugar, en diciembre de 2018 no habían tenido observaciones, pero en enero de 2019 si se les notificó de un aspecto.

En la nota se alertaba de la presencia de “cenizas y colillas de cigarros… en espacio de cuidado infantil, área de juegos y preparación de alimentos”, por lo que el lugar se comprometió a resolver mediante una carta.

Meses más tarde recibieron una nota de la Oficina de Desarrollo, “deben colocarse cubiertas protectoras en los enchufes que están al alcance de niños menores de cinco años”, pero de acuerdo con Infobae, el problema también aparece como corregido dentro de los registrados de las autoridades.