Tendencias
La falta de la libido como alarma en que algo anda mal en la pareja

A veces pasan meses y, sencillamente, no te apetece tener relaciones sexuales en absoluto. Nada, La libido brilla por su ausencia y es normal.
Existen muchos factores que pueden provocar una disminución de la libido. Causas biológicas, determinados medicamentos como los ansiolíticos o los antidepresivos, algunos anticonceptivos hormonales femeninos y muy frecuentemente, el estado anímico.
Cuando estamos felices, cómodos y tranquilos es mucho más probable que nuestro deseo sexual sea alto. Por el contrario, cuando estamos tristes, apagados o estresados es mucho más difícil que aparezca ese deseo sexual. Eso en todos los casos», explican algunos especialistas en el tema sexual entre parejas.
La relación entre libido y emociones existe en todos los casos. Ninguna persona que conozcas se salva de estas bajas y subidas de libido que provocan a veces los estados psicológicos.
Ni mujeres ni hombres porque, aunque la cultura popular haya difundido y perpetuado el mito de que los hombres deben estar cachondos el 100% del tiempo que respiramos, lo cierto es que sufren las mismas sequías de deseo sexual que las mujeres. Solo que todavía no han roto ese prejuicio y queda pendiente de normalizar.
«Hay mucha presión social para que los hombres tengan siempre deseo sexual. Parece que siempre deben estar preparados y con ganas de hacerlo.
Sin embargo, se acepta un poco más el hecho de que las mujeres puedan no tener apetito sexual. Pero es igualmente normal que no lo tengan.
“De hecho, en mi consulta, curiosamente trabajo con más hombres que tienen falta de deseo sexual que con mujeres. Pero en general depende del tipo de persona, no del género», comenta Lombardía quien, precisamente, está especializada en terapia sexual y de pareja.
Donde sí puede existir cierta diferencia, explica, es en qué hacemos respecto a esa falta de libido. Según ella, «los hombres suelen tener más facilidad para dejar por un momento esas emociones negativas o preocupaciones que están afectando al deseo sexual y adaptarse más fácilmente a tener sexo».
Pero insiste en que es una generalización: «Hay muchos hombres que no son capaces de hacerlo y se ven afectados igualmente. Y muchas mujeres que saben dejar a un lado las preocupaciones e intranquilidades que tienen y lanzarse a la intimidad».
Cómo lo abordo
En primer lugar, y una vez comprendida la estrecha relación entre tu ánimo y tus ganas de mojar, debes enfocarlo como una oportunidad de autoconocimiento. Porque si te pasas una buena temporada con el apetito sexual y descartas otras variables que puedan afectar a la libido, puede significar que algo no está yendo del todo bien en tu vida.
Sean tus relaciones, tu trabajo, tu ritmo de vida o tu autoestima. Te indica que hay muchas emociones negativas en tu cabeza y que debes reflexionar y trabajar para solucionarlo.
«Hay personas a las que les cuesta más reconocer sus propias sensaciones y sus propios estados emocionales. Y muchas veces la falta de libido es la señal de alarma. Es entonces cuando tenemos que pararnos a prestar atención y ver qué está pasando.
Por ejemplo, hay parejas que vienen a consulta porque tienen poco deseo sexual, pero eso les sirve para descubrir que detrás de todo eso hay otras cuestiones como insatisfacción laboral, estrés, sobreabundancia de tareas domésticas… No querer tener relaciones sexuales es el síntoma de algo más importante», explica la experta.
Esto es importante porque la relación libido/emociones funciona bidireccionalmente. Así lo cuenta la especialista tras haberlo vivido durante años en su consulta.
«Lo veo muchísimo. Personas que vienen a consulta con falta de deseo sexual y conforme va mejorando su libido y tienen más facilidad para llegar al orgasmo y para pasarlo bien, van sintiéndose mejor en el resto de facetas de su vida. Ves que comienzan a caminar distinto, a vestir distinto, a hablar distinto y a sonreír mucho más. Es un cambio brutal». El deseo sexual y el sexo como terapia emocional.
De todas formas, tampoco tienes que volverte loco. «Hay momentos de nuestra vida donde no nos apetece tener sexo y no nos importa».
Son malas épocas emocionales que forman parte del ciclo normal de una persona. No puedes estar siempre arriba. El problema, según la sexóloga, viene cuando las causas emocionales que provocan esa carencia de libido se cronifican: «Si el estrés está matando tu libido y tienes un trabajo que sabes que va a ser estresante toda tu vida, entonces sí tienes que ponerle remedio porque no es algo puntual».
Así que calma. Quizá la falta de libido no sea más que una oportunidad para verte de verdad y empezar a hacer cambios importantes en tu vida.
Jetset
Karol G revive con nostalgia los primeros pasos de su carrera artística

La superestrella latina Karol G sorprendió a sus seguidores al publicar en Instagram uno de los primeros videos que subió a YouTube, cuando apenas comenzaba su carrera musical en Colombia.
En la publicación, la artista recordó con nostalgia sus inicios: «Acabo de encontrar este video de cuando me grababa cantando y los subía a YouTube pensando que alguien podría verme… cuando no sabía hablar inglés y cantaba las letras como sonaban», escribió Karol G. En el video se le ve con su cabello al natural, demostrando su talento en una etapa donde buscaba cualquier oportunidad para destacar.
La cantante enfatizó la importancia de mirar hacia atrás y reconocer sus raíces, a pesar de siempre estar enfocada en el futuro: «Ver atrás y recordar de dónde vengo se siente cada vez más especial», agregó.
La publicación se llenó de comentarios de apoyo de sus seguidores, quienes destacaron su constancia y talento, reconociendo el esfuerzo que la ha llevado a convertirse en una de las figuras femeninas más representativas de la música latina.
Karol G ha recorrido un largo camino desde sus primeros videos en YouTube, consolidándose como una de las artistas más influyentes de América Latina y un referente para nuevas generaciones de músicos.
Su gesto de rescatar y compartir aquel video refleja no solo su trayectoria, sino también la humildad y el apego a sus inicios en la industria musical.
Jetset
Fallece Joe Caroff, diseñador del icónico logo de James Bond, a los 103 años

El diseñador gráfico Joe Caroff murió el pasado domingo en Manhattan, un día antes de cumplir 104 años, dejando un legado imborrable en la cultura cinematográfica. Caroff es reconocido por haber creado el emblemático logotipo de 007, así como cientos de carteles de películas que marcaron varias generaciones.
Nacido el 18 de agosto de 1921 en Roselle, Nueva Jersey, Caroff combinó creativamente el “7” de 007 con la silueta de una pistola, un diseño que se estrenó en la película “Dr. No” (1962), protagonizada por Sean Connery.
Caroff falleció por causas naturales y bajo cuidados paliativos, según confirmaron sus hijos Michael y Peter Caroff. Durante su carrera, trabajó en más de 300 campañas publicitarias y cinematográficas, incluyendo títulos como Last Tango in Paris, Cabaret, West Side Story, Manhattan y The Last Temptation of Christ.
Aunque recibió apenas $300 por el icónico logotipo de James Bond, su trabajo fue reconocido décadas después y se convirtió en un símbolo de la saga cinematográfica.
Caroff se retiró en 2006 y dedicó sus últimos años a la pintura y el dibujo. En febrero de 2025, sufrió la pérdida de su esposa, con quien estuvo casado 81 años.
El legado de Joe Caroff perdurará a través de sus diseños, que seguirán siendo referentes culturales y cinematográficos, especialmente el emblemático logo de 007, que continúa siendo símbolo de la saga James Bond.
Jetset
Muere Terence Stamp, el villano de ‘Superman’

La familia del actor británico Terence Stamp ha comunicado su fallecimiento este domingo. El intérprete, que saltó a la fama por su papel como el villano de Superman, tenía 87 años. “Deja un extraordinario trabajo como actor y escritor que seguirá inspirando a la gente”, afirma el escrito difundido, sin aclarar las causas de su muerte.
Nacido en el East End londinense en 1938, vivió de niño los bombardeos de la ciudad durante la II Guerra Mundial. Estudió interpretación gracias a una beca en Webber Douglas Academy of Dramatic Art y fue compañero de piso de otro gran actor británico, Michael Caine, y pareja de Julie Christie. Formó parte del Swinging London de los sesenta.
En 1962 debutó en el cine como protagonista de la adaptación de la novela de Herman Melville Billy Budd, dirigida por Peter Ustinov, un papel que le valió una nominación a los Oscar. Su siguiente aparición en la pantalla fue ese mismo año, frente a Laurence Olivier en el filme Escándalo en las aulas, dirigido por Peter Glenville. Pero su gran papel en aquella década fue como protagonista de El coleccionista de William Wyler, película con la que triunfó en Cannes en 1965. En 1967 participó en Lejos del mundanal ruido, de John Schesinger junto a Julie Christie, y en la primera película de Ken Loach, Pobre vaca.
Iba a ser James Bond después de Sean Connery, pero aquel plan no acabó de cuajar y se trasladó a Italia. Allí trabajó con Fellini en Toby Dammit y en Historias extraordinarias, una película que adaptaba tres relatos de Edgar Allan Poe por tres directores (Roger Vadim y Louis Malle completaron el trío). Stamp rememoraba en el documental Fellini: soy una gran mentiroso (2002) cómo sus rodajes con el director marcaron un antes y un después en su carrera actoral. También rodó en aquella década Teorema bajo las órdenes del gran Pier Paolo Pasolini.
Pero a pesar del prestigio y las distinciones con las que arrancó su trabajo en el cine, no fue hasta su papel en Superman en 1978 cuando alcanzó el estatus de estrella. Stamp interpretó al supervillano general Zod en las dos primeras películas de la saga junto a Christopher Reeve. Contó años más tarde que en el momento en que recibió la oferta se encontraba en un ashram en la India planteándose dedicarse al yoga tántrico. Ese telegrama de su agente le sacó de aquella aventura y le convirtió en el inolvidable y malvado Zod.
En los ochenta participó, entre otras películas, en La venganza de Stephen Frears, y en las exitosas Wall Street, de Oliver Stone y en Peligrosamente juntos con Robert Redford y Deborah Wringer. En los noventa rodó con la española Pilar Miró Beltenebros, y también actuó en el gran éxito Priscilla, reina del desierto. En la última década, participó en la producción de Tim Burton Ojos grandes (2014) y en 2021 en Última noche en el Soho, entre otras películas.
Además de su carrera como intérprete, Stamp ha escrito varios libros de memorias. Se casó por primera vez en 2002 con Elizabeth Rourke, una farmacéutica 35 años menor que él, de quien se divorció seis años después. Stamp siempre declaró que su gran amor fue la modelo Jean Shrimpton con quien formó una atractiva pareja en los sesenta.