Sucesos
Salvadoreño deportado narra detención en EEUU durante pandemia: «Casi pierdo la vida»
El salvadoreño Carlos recuerda el centro de detención para migrantes donde pasó más de dos meses encerrado, en Texas, Estados Unidos, como un lugar con una deficiente atención de salud que no mejoró en tiempos de la pandemia del nuevo coronavirus.
De vuelta en El Salvador, tras ser deportado en avión en medio de la emergencia, el hombre de 31 años dijo que perdió 20 kilos durante su detención, porque sufre de hipertensión y además enfermó del colon, pero las autoridades estadounidenses poco hicieron por curarlo.
Contó que permaneció en una celda para más de 80 personas desde finales de enero hasta inicios de abril, sin que observara medidas ante el coronavirus cuando la pandemia comenzó a propagarse en Estados Unidos, y sin que le hicieran una prueba antes de deportarlo.
«No hubo ningún tipo de protección ni de manejo (…) No aplicaron ningún tipo de pruebas», aseguró Carlos, quien habló con Xinhua bajo condición de no dar su nombre real por motivos de seguridad.
Analistas y defensores han advertido del riesgo de que Estados Unidos mantenga deportaciones hacia América Latina durante la pandemia sin examinar antes a los migrantes, exponiendo que los centros de detención tienen condiciones cuestionables y en varios se han registrado brotes.
En Guatemala, México y otros países latinoamericanos se han reportado contagios entre deportados, una situación que, según han planteado expertos, podía afectar a países de la región con sistemas de salud frágiles.
Carlos relató que durante su detención atestiguó cuando un cubano diabético se desmayó ante la indiferencia de los guardias y, en otra ocasión, un salvadoreño se dobló por dolor de abdomen sin que lo llevaran a la enfermería hasta después de varias horas.
«Sinceramente, teníamos el mismo régimen de las personas que están condenadas por delito grave», expresó el salvadoreño casado y con dos hijas.
Explicó que temer por su vida lo llevó a emigrar a Estados Unidos desde San Salvador a inicios de enero pasado, luego de que pandilleros que lo extorsionaban por ser un pequeño empresario amenazaron con matarlo cuando ya no pudo pagarles más dinero.
Como numerosos centroamericanos, Carlos cruzó la frontera de México con Texas por el río Bravo con la idea de pedir asilo al gobierno de Donald Trump, sin embargo oficiales lo arrestaron en cuanto pisó suelo estadounidense.

Imagen del 17 de mayo de 2020 de deportados salvadoreños, desde un centro de cuarentena del gobierno de El Salvador, donde permanecen desde su repatriación de Estados Unidos. (Xinhua/Alexander Peña)
La Patrulla Fronteriza lo encerró en una celda de corta estancia que los migrantes conocen como la «hielera» por su temperatura extremadamente fría, donde creyó que moriría porque estaba empapado tras atravesar el río y descalzo por orden de los guardias.
El migrante afirmó que pidió auxilio, pero que un oficial respondió: «Eso es lo que se ganan por venir a los Estados Unidos».
Después fue trasladado esposado de manos y pies al centro de detención de Río Grande, en la ciudad de Laredo, Texas, para quedar bajo custodia del Servicio de Inmigración y Aduanas (ICE, en inglés).
El salvadoreño dijo que su estancia en el centro fue traumática, pues describió que su peso bajó porque vomitaba los alimentos a causa de sus afecciones, y expuso que en una ocasión el médico tardó nueve días para atenderlo.
«Me fui de El Salvador buscando librar mi vida para Estados Unidos, pero en manos de las autoridades en Estados Unidos casi la pierdo», expresó.
Indicó que la autoridad migratoria lo subió el 7 de abril en un avión para deportarlo a El Salvador, junto con alrededor de 70 salvadoreños, tras sólo medir su temperatura y entregarle una mascarilla.
Carlos compartió su experiencia por teléfono desde un centro de cuarentena del gobierno salvadoreño donde ha permanecido desde su repatriación, y en el cual se encontraban a la fecha unos 100 deportados más.
Frente a la pandemia, El Salvador decidió en marzo aislar en centros de cuarentena a personas que entran al país centroamericano, con el objetivo de evitar una propagación del virus, medida que también ha abarcado instalaciones para los deportados.
«No sé qué va a ser de mí, de mi esposa y de mis hijas, pero algo tengo que hacer», respondió Carlos en torno a su futuro.
Hasta el momento, el gobierno del presidente Nayib Bukele no ha reportado contagios entre deportados a El Salvador, país que sumaba más de 1.500 casos confirmados con 31 fallecimientos.

Imagen del 17 de mayo de 2020 de deportados salvadoreños, desde un centro de cuarentena del gobierno de El Salvador, donde permanecen desde su repatriación de Estados Unidos. (Xinhua/Alexander Peña)
El director de la organización civil Instituto Salvadoreño del Migrante (Insami), César Ríos, dijo a Xinhua que las deportaciones desde Estados Unidos representaban un gran riesgo ante la posibilidad de que los migrantes se contagien en los centros de detención.
La cantidad de detenidos en centros de ICE que dieron positivo por el nuevo coronavirus sumaba ya los 1.145 casos de un total de 2.194 pruebas realizadas, según cifras de la propia agencia estadounidense con corte al martes.
«No debería sorprender que personas migrantes deportadas vengan contaminados (…) Debemos pedir a Estados Unidos que detenga las deportaciones ya, porque es como si nos estuvieran mandando otro nivel de vulnerabilidad que se va a incorporar a las comunidades», planteó Ríos.
El director de la organización subrayó que Estados Unidos continuó con las deportaciones en medio de la pandemia, a pesar de que los países centroamericanos pidieron frenarlas.
«Más que están en estos centros de detención, realmente no hay una atención adecuada o capacitada para ellos. Están, como decimos, a la buena suerte, van a sobrevivir los más fuertes», advirtió por su parte el médico de la Clínica Integral de Atención a Retornados de Insami, Jizi Moza.
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El Salvador acoge el VI Congreso Internacional Distrito Creativo
El Salvador recibió del 12 al 14 de noviembre de 2025 el VI Congreso Internacional Distrito Creativo, un evento que reunió a jóvenes, emprendedores y expertos de toda Latinoamérica para promover la creatividad, la innovación y el emprendimiento cultural.
Previo al inicio del congreso, la Primera Dama Gabriela de Bukele destacó en sus redes sociales la importancia de este encuentro: “Nuestro país es sede del VI Congreso Internacional Distrito Creativo ‘Construyendo el futuro con arte, cultura y tecnología’. Nos llena de orgullo recibir a tantos jóvenes y ponentes llenos de ideas, pasión y ganas de construir un mejor futuro. Espero que cada proyecto, cada propuesta y cada conversación en este congreso los acerque a cumplir sus sueños. Hoy somos un país que cree, promueve y apoya la creatividad, las artes y la cultura como pilares fundamentales para el desarrollo y la transformación de la vida nuestra niñez y juventud”.
El congreso se llevó a cabo en espacios como la Biblioteca Nacional de El Salvador (BINAES), el CEDART Interactivo y la Plaza Libertad, ofrecerá una combinación de conferencias, talleres, laboratorios y ferias de emprendimiento creativo. Entre las actividades destacan talleres de robótica, producción audiovisual, creación musical y artesanías, así como laboratorios de realidad virtual y prototipado.
Uno de los eventos centrales será el Desafío Naranja, competencia dirigida a jóvenes de 14 a 25 años que presentan sus proyectos culturales y creativos, con mentorías, presentaciones en vivo y posibilidades de incubación y financiamiento.
El VI Congreso Internacional Distrito Creativo es organizado por la Dirección Nacional de Arte del Ministerio de Cultura en conjunto con la Fundación Fil-Armonía de República Dominicana, y cuenta con la participación de instituciones como el Centro Nacional de Registros (CNR) y la Organización de Estados Iberoamericanos (OEI). El evento busca posicionar a El Salvador como un referente regional en innovación cultural, creatividad y emprendimiento, al mismo tiempo que ofrece a jóvenes y profesionales un espacio para intercambiar ideas, generar proyectos y fortalecer la economía creativa del país.
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El Salvador adquiere chips NVIDIA b300 para impulsar su “ia soberana” con energía geotérmica
El Salvador dio un nuevo paso hacia la construcción de su propio ecosistema de inteligencia artificial, tras anunciar la adquisición de chips NVIDIA B300, uno de los procesadores más avanzados del mundo para cargas intensivas de IA. La información fue confirmada por la Oficina Nacional de Bitcoin (ONBTC) a través de su cuenta oficial en X.
Según detalló la entidad, la decisión fue tomada luego de una reunión entre el Presidente Nayib Bukele y Aaron Ginn, CEO y cofundador de Hydra Host, una empresa radicada en Miami especializada en infraestructura de datos y gestión de GPU a gran escala. Hydra Host administra actualmente GPU en más de 50 centros de datos alrededor del mundo.
Los nuevos procesadores serán enviados al Laboratorio Nacional de Inteligencia Artificial de El Salvador, creado tras la aprobación de la Ley de Fomento de la Inteligencia Artificial y Tecnologías, avalada por la Asamblea Legislativa a inicios de 2025.
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Mercado San Miguelito abrirá sus puertas éste sábado 15 de noviembre
El Presidente Nayib Bukele anunció la apertura del renovado Mercado San Miguelito, que comenzará a atender al público a partir de mañana, desde las 7:00 a.m., marcando un nuevo capítulo para uno de los centros de comercio más emblemáticos de San Salvador.
El Mandatario hizo un llamado a la población y a los vendedores a mantener el orden, la higiene y la responsabilidad dentro del recinto, como parte esencial del funcionamiento del nuevo espacio.
“Así ganamos todos: ellos, sus familias, sus clientes y nuestro país”, afirmó el Presidente Bukele, resaltando que el buen uso del mercado beneficiará directamente a las familias que dependen del comercio y a la ciudadanía que busca espacios seguros y ordenados para realizar sus compras.
La reapertura del Mercado San Miguelito representa un avance en la modernización de los espacios públicos, ofreciendo mejores condiciones para los comerciantes y una experiencia más agradable y segura para los visitantes.







