Internacionales
Maine también bloqueó la candidatura de Donald Trump en las elecciones primarias

La secretaria de Estado demócrata de Maine retiró el jueves al ex presidente Donald Trump de la papeleta de las primarias presidenciales del estado en virtud de la cláusula de insurrección de la Constitución, convirtiéndose en la primera funcionaria electoral en tomar medidas unilaterales mientras el Tribunal Supremo de Estados Unidos está a punto de decidir si Trump sigue siendo elegible para continuar su campaña.
La decisión de la secretaria de Estado, Shenna Bellows, sigue a una sentencia dictada en diciembre por el Tribunal Supremo de Colorado, que expulsó a Trump de las urnas en virtud de la Sección 3 de la 14ª Enmienda. Esa decisión se ha suspendido hasta que el Tribunal Supremo de EEUU decida si Trump está excluido por la disposición de la época de la Guerra Civil, que prohíbe a los que “participaron en la insurrección” ocupar cargos públicos.
La campaña de Trump dijo que apelaría la decisión de Bellows ante el sistema judicial del estado de Maine, y es probable que el más alto tribunal del país tenga la última palabra sobre si Trump aparece en la papeleta electoral allí y en los demás estados.
Bellows dictaminó que Trump no podía presentarse a las elecciones porque su papel en el ataque al Capitolio de EEUU del 6 de enero de 2021 violaba la Sección 3, que prohíbe ejercer el cargo a quienes “participen en insurrección”. Bellows emitió el fallo después de que algunos residentes del estado, incluido un grupo bipartidista de ex legisladores, impugnaran la posición de Trump en la boleta electoral.
“No llego a esta conclusión a la ligera”, escribió Bellows en su decisión de 34 páginas. “Soy consciente de que ningún Secretario de Estado ha privado nunca a un candidato presidencial del acceso a la papeleta basándose en la Sección 3 de la Decimocuarta Enmienda. También soy consciente, sin embargo, de que ningún candidato presidencial ha participado antes en una insurrección”.
La campaña de Trump fustigó de inmediato el fallo. “Estamos siendo testigos, en tiempo real, del intento de robo de unas elecciones y de la privación del derecho al voto del votante estadounidense”, dijo el portavoz de la campaña, Steven Cheung, en un comunicado.
La sentencia del jueves demuestra la necesidad de que el más alto tribunal del país, que nunca se ha pronunciado sobre la Sección 3, aclare qué pueden hacer los estados.
Aunque Maine sólo tiene cuatro votos electorales, es uno de los dos estados que los divide. Trump ganó uno de los electores de Maine en 2020, por lo que dejarlo fuera de la papeleta en caso de que se convierta en el candidato republicano a las elecciones generales podría tener implicaciones enormes en una carrera que se espera que se decida por un estrecho margen.
Esto contrasta con Colorado, donde Trump perdió por 13 puntos porcentuales en 2020 y donde no se espera que compita en noviembre si gana la nominación presidencial republicana.
En su decisión, Bellows reconoció que el Tribunal Supremo probablemente tendrá la última palabra, pero dijo que era importante que cumpliera con su deber oficial. Eso le valió el elogio de un grupo de destacados votantes de Maine que presentaron la petición que la obligaba a considerar el caso.
“La secretaria Bellows ha demostrado un gran valor en su decisión, y esperamos poder ayudarla a defender su juiciosa y correcta decisión en los tribunales. Ningún cargo electo está por encima de la ley ni de nuestra Constitución, y la sentencia de hoy reafirma este importantísimo principio estadounidense”, afirmaron en un comunicado la republicana Kimberly Rosen, el independiente Thomas Saviello y el demócrata Ethan Strimling.
Internacionales
Mujer perdió la vista de su ojo derecho por usar lentes de contacto de manera incorrecta

El uso incorrecto de lentes de contacto en entornos acuáticos se ha convertido en un riesgo creciente para la salud ocular.
Un caso impactante es el de Maureen Cronin, una instructora de natación de 53 años, quien sufrió una grave infección ocular, conocida como queratitis por acanthamoeba, después de utilizar sus lentes en piscinas.
La infección devastadora
Cronin, que trabajaba como salvavidas y enseñaba natación, no era consciente de los riesgos que implicaba usar lentes de contacto mientras estaba en el agua.
Comenzó a sentir molestias en su ojo derecho, describiéndolo como si tuviera un grano de arena dentro.
Con el paso de los días, el dolor se intensificó, y la mujer consultó con varios médicos.
Inicialmente, los especialistas le diagnosticaron una laceración corneal y le recetaron gotas oftálmicas, pero su situación empeoró.
Un mes después, un especialista descubrió la verdadera causa de su afección: una infección causada por la acanthamoeba, un parásito microscópico presente en el agua dulce, el agua salada y las piscinas.
Este organismo puede quedar atrapado entre el lente de contacto y la córnea, lo que permite que la infección se propague rápidamente a través de pequeñas abrasiones en el ojo.
La infección, si no se trata a tiempo, puede causar daños severos y permanentes en la visión.
Tras el diagnóstico, Cronin fue hospitalizada durante 48 días en el Stony Brook University Hospital en Nueva York.
A pesar de recibir tratamiento intensivo, su condición continuó empeorando, por lo que se sometió a un trasplante de córnea con la esperanza de recuperar parte de su visión.
Sin embargo, el rechazo del tejido donado complicó aún más su situación, y su capacidad visual se redujo significativamente.
Actualmente, su ojo derecho presenta una apariencia nublada, y Cronin aguarda con esperanza una nueva cirugía que podría mejorar su visión.
Internacionales
Plegarias en el mundo por el papa Francisco, hospitalizado en estado crítico

Fuentes vaticanas precisaron que el pontífice no recibió una nueva transfusión sanguínea, como el sábado, aunque seguía recibiendo oxígeno y se le habían realizado nuevos análisis cuyos resultados se conocerían por la noche.
El jesuita argentino se encuentra hospitalizado desde el 14 de febrero en el hospital Gemelli de Roma con bronquitis, que derivó en una neumonía bilateral.
Su estado empeoró el sábado con «una crisis asmática prolongada, que requirió la aplicación de oxígeno», según el último parte médico, así como problemas hematológicos que precisaron «la administración de una transfusión sanguínea».
El pontífice de 88 años, cuyo diagnóstico médico era «reservado» y su estado de salud «crítico» el sábado por la noche, quiso enviar un mensaje tranquilizador, en el texto de la oración dominical del Ángelus.
«Continúo con confianza mi hospitalización (…) siguiendo con los tratamientos necesarios; ¡y el descanso forma también parte de la terapia!», declaró el jefe de la Iglesia católica en un mensaje escrito en los últimos días, según una fuente vaticana.
Próximos días «cruciales»
Los médicos que se ocupan del papa habían alertado de la fragilidad de su estado desde el viernes por la tarde.
«¿Está el papa fuera de peligro? No, el papa no está fuera de peligro», afirmó el doctor Sergio Alfieri a los periodistas en el hospital Gemelli.
«La situación es cada vez más preocupante», estimó Fabrizio Pregliasco, un destacado virólogo italiano, citado el domingo por el diario La Stampa.
«La edad del Santo Padre, así como los antecedentes de salud, como por ejemplo la bronquitis asmática, podrían haber complicado las cosas y no solo un poco», agregó.
«Hay que esperar que la terapia antibiótica funcione para evitar el riesgo de septicemia […] que puede tener un desenlace fatal. El papa está sin duda en buenas manos pero las próximas horas y días serán cruciales», estimó el experto.
Plegarias por el papa
Oraciones por su salud se han organizado desde Roma, en Italia, hasta Argentina o Irak.
«Él es fuerte, siempre fue fuerte, pero está la naturaleza. Sé que está muy grave y la edad. Espero que se recupere, pero me da lástima», declaró Héctor Armando Díaz, un jubilado de 76 años, en la entrada de la Catedral de Buenos Aires, hablando de su compatriota, primer papa latinoamericano.
En la entrada de la iglesia dos televisores difundían imágenes de Jorge Bergoglio, antes de ser papa, lavando pies o dando misas en barrios pobres, como era su costumbre en Buenos Aires.
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, deseó el sábado por la noche en X una «pronta recuperación al papa Francisco, gran humanista que ha optado por los más pobres y por promover la fraternidad entre las personas y entre las naciones».
En el otro extremo del mundo, una decena de iglesias en la región de Mosul, en el norte de Irak, celebraron misas por la salud del papa.
Francisco siempre ha «apoyado al pueblo iraquí y lo mínimo que podemos hacer es expresar nuestra solidaridad, nuestro amor», declaró Adnan Hadi, un profesor universitario.
Otros líderes religiosos y políticos han dicho que están rezando por el papa, incluido el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, que ha sido «informado» de la situación, según la Casa Blanca.
Desde el sábado por la noche, los internautas publicaron cientos de mensajes afirmando que rezaban por Francisco, algunos acompañados de una foto del obispo de Roma solo en la plaza de San Pedro durante la pandemia de covid-19.
La hospitalización del papa, la cuarta desde 2021, suscitó una gran preocupación por su salud, ya debilitada por una serie de problemas en los últimos años, desde operaciones de colon y de abdomen hasta dificultades para andar.
Jorge Bergoglio ha dicho en repetidas ocasiones que aún no ha llegado su momento de dimitir, pero sus problemas de salud han suscitado dudas sobre su capacidad para liderar a los casi 1.400 millones de católicos del mundo.
Pese a todo, el papa ha mantenido en los últimos años una agenda frenética y en septiembre realizó una gira de 12 días por Asia-Pacífico.
Internacionales
Trump «confía» en alcanzar pronto acuerdo para poner fin a conflicto de Ucrania

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, expresó su confianza en que Washington puede negociar exitosamente el final del conflicto de Ucrania «esta semana», dijo el sábado la secretaria de Prensa de la Casa Blanca, Karoline Leavitt.
«El presidente y su equipo están muy enfocados en continuar las negociaciones con ambas partes de esta guerra para poner fin al conflicto, y el presidente tiene plena confianza en que podamos lograrlo esta semana», dijo Leavitt en el Jardín Sur tras regresar de la Conferencia de Acción Política Conservadora, citada por el principal sitio web político estadounidense «The Hill».
La secretaria también indicó que el secretario del Tesoro, Scott Bessent, ha participado en discusiones sobre un propuesto acuerdo con los ucranianos para aprovechar minerales en bruto.
«En lo referente a minerales críticos, este es un elemento importante para el presidente. Es muy importante para el presidente porque recuperará el dinero de los impuestos estadounidenses», dijo Leavitt, citada por «The Hill».
Por otra parte, el presidente del Parlamento ucraniano dijo que el Gobierno ucraniano comenzará a trabajar seriamente desde el principio la próxima semana para concluir un acuerdo sobre minerales de la tierra y garantías de seguridad con Estados Unidos, según reportes desde Ucrania.
Ruslan Stefanchuk, quien es cercano al presidente ucraniano, Volodymyr Zelenskyy, dijo el viernes que el Gobierno ucraniano enviará un equipo de expertos trabajando a partir del lunes para la firma de un acuerdo con Estados Unidos.