Internacionales
Sentencian a 30 años de cárcel a un exentrenador de fútbol por pedofilia en el Reino Unido
«Pura maldad» y la «encarnación del diablo». Así calificó el juez al exentrenador y cazador de talentos Barry Bennell tras haberlo condenado a 30 años de prisión por abusar de 12 jugadores de ligas menores en el Reino Unido, informa The Guardian. El abusador podrá salir de la cárcel en libertad condicional luego de cumplir los primeros 15 años de sus sentencias.
«Usted sabía que para cada uno de estos chicos el fútbol era su vida, la carrera por la cual hubieran dado todo», le dijo el juez Clement Goldstone al exentrenador en un tribunal de Liverpool.
«Usted era como un dios que tenía a su alcance la capacidad de ayudarlos a cumplir sus ambiciones y realizar sus sueños. En realidad, usted fue la encarnación del diablo. Robó sus infancias e inocencias para satisfacer su propia perversión», prosiguió el letrado.
El «hacedor de estrellas» y sus víctimas
Bennell evitó mirar a sus víctimas, ahora en edades que oscilan entre los 40 a 50 años de edad, mientras se leían las declaraciones que detallaron como algunas de ellas se habían quedado al borde del suicidio, mientras que otros recurrieron a las drogas y el alcohol. Muchas de las que fueron jóvenes promesas futbolísticas aún sufren de depresión, ansiedad, ataques de pánico, ‘flashbacks’ y pesadillas.
Entre los presentes en la corte de Liverpool que ha juzgado el caso se encontraba David Hazeldine, hermano de Mark, que había sido entrenado por Bennell y se suicidó en 2006. También estaba presente Andy Woodward quien, tras ser entrevistado por The Guardian en noviembre de 2006, animó a otros jugadores a salir a la luz para contar sus historias. Woodward recibió el agradecimiento de las víctimas en las escalinatas del tribunal de la ciudad inglesa.
ennell ya ha cumplido dos condenas de cárcel en el Reino Unido y una en EE.UU. y fue hallado culpable la semana pasada de 50 delitos relacionados con 12 jugadores menores de edad —entre 8 y 14 años— entre 1979 y 1990. El que estuviera considerado «hacedor de estrellas» por su habilidad para encontrar talentos jóvenes admitió siete de los cargos de los que fue acusado. El jurado lo encontró culpable de otros 43 delitos.
«Era un niño, y entre mis 10 y 13 años de edad ese monstruo decidió que era divertido usarme de juguete sexual. Mi padre encuentra muy difícil pensar que cuando me estaba llevando a jugar al fútbol para convertirme en el futbolista que siempre había querido ser de hecho durante tres años me estuvo llevando al infierno», explicó la víctima más joven.
La abogada defensora de Bennell, Eleanor Laws, afirmó que su cliente estaba en remisión de un cáncer y que había sido sometido a dos operaciones para que extirparle tumores. Asimismo, la letrada dijo que el acusado estaba sujeto a un régimen por el cual debía ser alimentado con una sonda ocho veces al día. También aseguró que se encontraba medicado contra la ansiedad y que se había sometido a tratamiento para tratar su pedofilia.
«Hoy le devolvemos a usted nuestra vergüenza, nuestra culpa y nuestra tristeza. Nunca la deberíamos haber cargado nosotros desde un principio», declaró Micky Fallon, una de las víctimas.
Internacionales
El plazo llegó: Tiktok deja de funcionar en EE.UU.
Este viernes, la Suprema Corte de los Estados Unidos dictó una sentencia que obliga a la red social TikTok a cesar sus operaciones en dicho país a partir del próximo domingo, lo que dejaría a 170 millones de usuarios sin acceso a la popular aplicación de videos cortos. El plazo llegó y la red social ha dejado de estar disponible para los usuarios del vecino país del norte.
Esto pese a que recientemente Donald Trump había indicado que se analizaría esta decisión a partir del lunes, sugiriendo que TikTok podría tener una prórroga de 90 días antes de que se materialice la suspensión definitiva.
Durante una entrevista con la cadena NBC, Trump expresó que una prórroga de tres meses podría ser una medida adecuada, señalando que “es lo apropiado” y que se trataría de una “situación muy importante” que requiere una evaluación cuidadosa.
“Si decido hacerlo, probablemente lo anunciaré el lunes”, comentó el próximo presidente de Estados Unidos, dejando abierta la posibilidad de una extensión temporal en lo que respecta a la vigencia de la ley que ordena la salida de TikTok del territorio estadounidense.
Esta decisión de suspender TikTok en Estados Unidos pudo haberse aplazado debido a que la nueva ley permite que el presidente suspenda la aplicación de la medida por tres meses.
Funcionarios del gobierno saliente de Joe Biden indicaron que la ley quedaría en manos de Trump, quien asumirá la presidencia el lunes. En consecuencia, el futuro de TikTok dependía en gran medida de las decisiones del republicano.
La relación entre Donald Trump y TikTok ha sido complicada desde 2020, cuando intentó prohibir la aplicación alegando preocupaciones de seguridad nacional, debido a su vinculación con China. Sin embargo, en los últimos días, su postura ha cambiado, y ahora parece inclinarse hacia la continuidad de la plataforma en Estados Unidos.
Trump incluso discutió este asunto con el presidente chino Xi Jinping en una conversación telefónica celebrada este viernes, lo que refleja un enfoque más conciliador respecto a la aplicación.
¿Qué dice la red social ante su posible salida?
Ante el fallo de la Suprema Corte, TikTok emitió un comunicado en el que confirmó su salida de Estados Unidos, aunque dejando abierta la posibilidad de que la suspensión se retrase. Shou Zi Chew, director ejecutivo de la compañía, agradeció a los usuarios estadounidenses por su apoyo y les aseguró que la empresa haría todo lo posible para garantizar el futuro de la plataforma.
A pesar del fallo, el directivo también expresó su gratitud hacia Trump por su disposición a trabajar conjuntamente para encontrar una solución que permita a TikTok seguir operando en Estados Unidos.
Internacionales
Se planean bailes inaugurales y protestas en Washington durante la toma de poder de Trump
Washington se ha estado preparando para muchas cosas esta semana, incluidos varios días más de temperaturas gélidas y hordas de personas y policías para la toma de mando presidencial, además de protestas relacionadas, previstas en toda la ciudad los próximos días.
Las autoridades dijeron esta semana que esperaban que unas 250.000 personas con boletos de entrada llegaran a la capital de Estados Unidos para presenciar la toma de posesión de Donald Trump como presidente nuevamente. La última vez que ocupó el cargo fue entre 2017 y 2021.
Se esperan menos visitantes para la ceremonia del próximo lunes que los que estuvieron presentes en la primera toma de mando de Trump, dijeron funcionarios locales y federales en una conferencia de prensa. En 2017, se prepararon para más de un millón de personas.
Se espera que las temperaturas sean particularmente bajas en Washington el lunes. Se pronostica que la temperatura al mediodía, cuando Trump prestará juramento, estará en los 20 grados Fahrenheit (- 6 grados Celsius), aproximadamente 20 grados por debajo de lo normal.
Seguridad reforzada
Aunque se espera una menor participación en esta ocasión, los recientes actos de violencia —como el ataque del día de Año Nuevo en Nueva Orleans— significan que habrá una mayor presencia de seguridad, dijeron los funcionarios.
El día de la investidura, 25.000 agentes de policía y militares estarán en el Distrito de Columbia para proporcionar seguridad, incluida la activación total de la policía de DC, 7.800 tropas de la Guardia Nacional y unos 4.000 oficiales de todo el país, según William McCool, el agente especial a cargo de la Oficina de Campo de Washington del Servicio Secreto.
Antes de la inauguración, Washington acogerá tanto actos de celebración como protestas.
El domingo por la tarde se ha previsto un mitin por la victoria de Trump en el Capital One Arena, donde actuará la banda estadounidense Village People.
El estadio tiene capacidad para 20.000 personas, según informó a una emisora de noticias de Washington la empresa que lo gestiona, Monumental Sports & Entertainment.
La empresa dijo en un comunicado a News4 que el estadio se ha ofrecido a todas las administraciones, “independientemente del partido”, durante décadas.
“Estamos contentos de que el presidente Trump haya aceptado nuestra oferta y le daremos la bienvenida a él y a sus invitados en el Capital One Arena el 19 de enero”, decía el comunicado.
Aunque habrá tres bailes inaugurales oficiales, se han programado más de una docena de bailes inaugurales no oficiales durante todo el fin de semana en Washington.
Sin embargo, también se han programado protestas.
El sábado se espera que una manifestación llamada Marcha del Pueblo atraiga a decenas de miles de personas al centro de Washington. La manifestación está organizada por varios grupos de derechos civiles, justicia racial y salud reproductiva.
“Mientras Trump asume la presidencia en enero, nos reunimos para movilizar nuestro poder colectivo y oponernos a sus esfuerzos por hacer retroceder nuestros derechos y libertades”, dijo Analilia Mejía, codirectora ejecutiva del Centro para la Democracia Popular, en un comunicado.
El lunes, el Día Nacional de Acción de la Coalición de Respuestas incluirá una manifestación y una marcha, según informes de los medios.
Acostumbrados a las multitudes
Los funcionarios de Washington dijeron que están acostumbrados a manejar multitudes y protestas.
“Aquí en la ciudad, permitimos protestas pacíficas todo el tiempo”, dijo la jefa de policía de DC Pamela Smith en una conferencia de prensa esta semana. “Pero cuando se trata de violar la ley, simplemente no lo vamos a tolerar”.
El lunes por la noche, después de la investidura, se espera que Trump se desplace entre las tres fiestas inaugurales oficiales.
Pero las celebraciones de la investidura no se limitarán a Washington.
Por ejemplo, en Florida, donde Trump reside en su resort Mar-a-Lago, el Club pro-Trump Villages M.A.G.A. organizará una fiesta inaugural el lunes por la noche, a unas 60 millas al noroeste de Orlando. La celebración ya tiene entradas agotadas, según un anuncio de Eventbrite que anuncia la fiesta.
Internacionales
El presidente destituido de Corea del Sur Yoon Suk-yeol declaró en juicio
El surcoreano Yoon Suk-yeol acudió este sábado a declarar ante el tribunal que debe decidir si extender o no el arresto del depuesto mandatario, detenido por la oficina nacional anticorrupción por su fugaz declaración de la ley marcial.
El surcoreano Yoon Suk-yeol acudió este sábado a declarar ante el tribunal que debe decidir si extender o no el arresto del depuesto mandatario, detenido por la oficina nacional anticorrupción por su fugaz declaración de la ley marcial.
El vehículo que transportaba a Yoon partió poco antes de las 13:30 hora local (4:30 GMT) del Centro de Detención de Seúl, en Uiwang, donde se encontraba y llegó a su destino una media hora después, escoltado por una comitiva de vehículos de seguridad que llegaron a ser zarandeados por multitudes concentradas en el camino, retransmitió en directo la agencia de noticias Yonhap.
Yoon declaró durante unos 40 minutos para explicar ante el Tribunal del Distrito Oeste de Seúl sus argumentos sobre la legitimidad de su imposición del estado de excepción el pasado 3 de diciembre, que le costó la destitución once días después, según informó el citado medio.
Tanto la acusación como el equipo legal del presidente invirtieron por su parte 70 minutos, respectivamente, en presentar sus alegatos.
El tribunal concluyó la audiencia tras unas cinco horas escuchando los argumentos de ambas partes, mientras en el exterior se concentraban más de 12.000 simpatizantes de Yoon, coreando su nombre y ondeando banderas de Corea del Sur y Estados Unidos. Algunos rompieron a llorar, mientras otros se vieron involucrados en pequeños altercados con la policía.
Se vivieron algunos momentos de tensión creciente a medida que los manifestantes intentaban abrirse paso a empujones para intentar entrar en el recinto del tribunal, mientras solicitaban a gritos que abrieran las puertas y les dejaran ver al presidente.
“El presidente explicó y respondió fielmente sobre los hechos, las pruebas y las cuestiones jurídicas”, dijo su abogado, Yun Gap-geun, a los periodistas apostados en la entrada del tribunal. “Esperaremos tranquilamente hasta que se conozca la decisión”, añadió.
Yoon fue arrestado el pasado miércoles tras un largo asedio a su residencia por parte de las autoridades y el tribunal debe ahora decidir si extender el período inicial de 48 horas de detención, que se ha visto intermitentemente suspendido por los intentos de su defensa de entorpecer los procedimientos abiertos en su contra.
Está previsto que el tribunal tome una decisión al respecto como pronto la noche de este mismo sábado, o a primera hora del domingo.
De ser aceptada la solicitud, la detención de Yoon podría extenderse hasta 20 días. Si es rechazada, se espera que regrese a su residencia para seguir preparando su defensa.
La solicitud para prolongar la detención de Yoon fue presentada en la víspera por la Oficina para los Casos de Corrupción de Altos Funcionarios (CIO), el ente que lidera una investigación conjunta con la Policía y el Ministerio de Defensa sobre si su declaración de la ley marcial pudo equivaler a un intento de insurrección, el único delito ante el que un presidente surcoreano no tiene inmunidad.
Yoon, el primer presidente de la historia surcoreana en ser detenido mientras está en el cargo (pese a haber sido suspendido de sus funciones por su destitución), también había presentado un recurso para revocar su orden de detención, que fue rechazado.
En paralelo a esta investigación penal, el Tribunal Constitucional de Corea del Sur tiene abierto otro procedimiento para decidir antes de mediados del próximo mes de junio si se mantiene la destitución de Yoon o se le restituyen sus funciones.
El presidente, que se sometió a más de diez horas de interrogatorio por parte de la CIO el día de su arresto, se negó a comparecer en las dos jornadas de interrogatorio posteriores, alegando motivos de salud y que ya ha explicado suficientemente su postura, y tampoco ha comparecido hasta ahora en el Constitucional.
Yoon sostiene que su imposición de la ley marcial fue “un ejercicio de autoridad presidencial”, y no un crimen.