La Policía de la India reabrió un caso de muerte después de que Warisha Ali, una joven de 24 años declarada muerta y enterrada, apareciera viva una semana despué,  informa Hindustan Times. El cuerpo sepultado pertenece a una mujer asesinada que fue erróneamente identificado por la propia familia de Ali.

La Policía encontró el pasado 27 de julio un cadáver femenino en una maleta en la ciudad de Ghaziabad, estado de Uttar Pradesh y, para facilitar la identificación, difundió las imágenes en redes sociales. La madre y el hermano de Warisha contactaron con los agentes y reconocieron a la joven en la mujer fallecida.

Explicaron que Warisha había desaparecido de la casa de su marido Amir poco después de su boda y que los recién casados habían tenido un conflicto violento, por lo que la familia del esposo fue detenida para ser interrogada.

El cadáver de la mujer asesinada fue sepultado, pero la aparición de Warisha con vida ha obligado ahora a reabrir el caso. Los investigadores tratan de nuevo de determinar la identidad de la fallecida y, pese a que habían guardado su ADN, el cuerpo será desenterrado para seguir con la investigación.

Los agentes también están verificando los testimonios de los familiares de Warisha. “La secuencia entera de los hechos está siendo examinada y si se revela que las intenciones de los parientes eran de mala fe, enfrentarán medidas legales”, comentó el inspector general Praveen Kumar.

Al mismo tiempo, mientras se levantaron los sospechas de asesinato contra los familiares de Amir, los agentes investigan ahora acusaciones de acoso y violencia física contra Warisha presentadas por parte de la familia del esposo.

El testimonio de Warisha serán registrados ante el juez mientras los oficiales investigan las razones por las cuales abandonó la casa de su marido y desapareció, recogen medios locales.