Internacionales
Varios muertos y heridos por explosión en el aeropuerto militar de Kabul
Varias personas murieron por una explosión a la entrada del aeropuerto militar de Kabul, la capital afgana, la mañana de Año Nuevo (01.01.2023), según informó el Ministerio del Interior afgano sin ofrecer más detalles o el número exacto de víctimas. El aeropuerto militar de Kabul se encuentra cerca del aeropuerto civil y del Ministerio del Interior. Según fuentes locales, todas las vías de acceso al lugar del ataque han sido acordonadas por las fuerzas de seguridad talibanes.
El motivo de la explosión en esta instalación situada junto al aeropuerto internacional de Kabul era incierto, dijo el portavoz del ministerio de Interior de Afganistán, Abdul Nafy Takor, que no confirmó si se trata de un atentado. “Un número de nuestros compatriotas ha sido martirizado y herido por la detonación”, dijo Takor. “Compartiremos más información tras investigar la zona”, anunció.
Nadie se atribuyó inicialmente la responsabilidad del ataque, pero desde que los talibanes tomaron el poder, el grupo yihadista Estado Islámico ha intensificado sus ataques en Afganistán. Las autoridades talibanes aseguran que han mejorado la seguridad del país desde su regreso al poder en agosto de 2021, pero han sufrido multitud de atentados, muchos reivindicadas por la rama local del EI.
El principal objetivo de los ataques suele ser o las minorías religiosas o las embajadas extranjeras. Tanto EI como los talibanes pertenecen al Islam sunita. Sin embargo, ambos están duramente enfrentados entre sí. El grupo yihadista Estado Islámico (EI) de Khorasan, la rama afgana del grupo terrorista, se ha erigido como la principal amenaza a la estabilidad del país, si bien los fundamentalistas insisten en negar que la organización armada represente un desafío de seguridad.
El EI asumió la autoría de un ataque el pasado lunes en el que murieron tres miembros de las fuerzas de seguridad de los talibanes, incluido un comandante de la Policía, en el noreste de Afganistán. El pasado 12 de diciembre, el grupo yihadista llevó a cabo un ataque contra un hotel frecuentado por ciudadanos chinos en Kabul, en el que murieron los tres asaltantes y 18 personas resultaron heridas. En respuesta a sus ataques, los talibanes han dirigido en diciembre diversas operaciones contra el EI en diversos puntos del país.
Nigeria registró este viernes un nuevo secuestro masivo en la escuela mixta St. Mary’s, en el estado de Níger, donde hombres armados se llevaron a 303 estudiantes y 12 profesores, según la Asociación Cristiana de Nigeria (CAN). El hecho ocurre días después del secuestro de 25 alumnas en el estado vecino de Kebbi, convirtiéndose en el segundo ataque de este tipo en una semana.
La cifra representa casi la mitad de los 629 alumnos inscritos en el centro. El reverendo Bulus Dauwa Yohanna, obispo de la diócesis de Kontagora, revisó el dato tras visitar la escuela y confirmar que otros 88 estudiantes habían sido capturados cuando intentaban huir.
El gobierno nigeriano no confirmó oficialmente el número de secuestrados y señaló que el recuento continúa. Estos ataques, sumados a un atentado reciente contra una iglesia, llevaron a las autoridades de los estados de Níger, Katsina y Plateau a ordenar el cierre de todas las escuelas. El Ministerio de Educación dispuso también el cierre de 47 internados de secundaria.
El presidente Bola Tinubu canceló sus compromisos internacionales para atender la crisis. En Estados Unidos, el secretario de Defensa, Pete Hegseth, instó al gobierno nigeriano a tomar medidas urgentes para frenar la violencia contra los cristianos.
Los secuestros se producen en un contexto de violencia ejercida por yihadistas y por bandas criminales conocidas como «bandidos», que desde hace años operan en regiones con débil presencia estatal, realizando ataques y secuestros para obtener rescates. La creciente cercanía entre estos grupos preocupa a las autoridades del país.
Al menos 10 personas murieron y otras 20 resultaron heridas este sábado por un accidente de autobús en el occidental estado mexicano de Michoacán, informaron autoridades locales.
El siniestro ocurrió en la carretera que une Morelia, capital de Michoacán, con el poblado de Pátzcuaro, informó la policía de Morelia en un comunicado.
«Se informa que hay alrededor de 10 personas sin vida y cerca de 20 personas lesionadas, por lo que se realizan labores de extracción atención médica en el lugar», dijo la corporación.
Añadió que la circulación en la vía permanece cerrada mientras trabajan cuerpos de rescate.
Hasta el momento, las autoridades no han especificado la causa del accidente.
En México se suelen registrar accidentes en las carreteras, ya sea por exces de velocidad o falta de mantenimiento en los vehículos, principalmente autobuses o camiones de carga.
En septiembre, un camión cargado con casi 50.000 litros de gas estalló en un cruce de Ciudad de México, lo que provocó 32 muertes.
La Defensa Civil de Gaza anunció la muerte de al menos siete personas en ataques israelíes en el el territorio palestino, donde Israel y Hamás se acusan mutuamente de violar la frágil tregua.
El portavoz de esta organización de primeros auxilios que opera bajo la autoridad de Hamás, Mahmud Basal, informó de tres personas muertas en Ciudad de Gaza (norte), tres en Deir al Balah (centro) y un muerto en la región de Nuseirat (centro).
El ejército israelí publicó casi simultáneamente un comunicado en el que afirmaba haber matado el sábado a un «terrorista armado» en el sur del territorio palestino, que, según dijo, había disparado contra sus soldados y cruzado una línea que marcaba sus posiciones.
Por otra parte el ejército israelí dijo haber llevado a cabo el sábado nuevos ataques contra Hezbolá en el sur del Líbano, a pesar de un alto el fuego acordado con el movimiento proiraní, al que acusa de intentar rearmarse.
«Hace poco, el ejército israelí atacó varios lanzadores de Hezbolá que habían sido identificados recientemente y que estaban instalados en sitios militares en el sur de Líbano», indica el comunicado militar israelí, que precisa que otros ataques tuvieron lugar en el Valle de Becá.
