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Trabajador de Hospital Zacamil es ultimado de tres disparos en su cabeza

Sujetos desconocidos y abordo de una motocicleta asesinaron de tres disparos al joven Dennis Abalderto Laínez Villacorta, de 21 años, sobre el final de la calle El Progreso de la colonia Buena Vista, en el municipio de Mejicanos, del departamento de San Salvador, informaron agentes de la Policía Nacional Civil (PNC).
El crimen fue perpetrado el martes a las 11:30 a.m. en las cercanías del centro penal La Esperanza, mejor conocido como Mariona, cerca del punto de buses ruta 2-A, del referido municipio.
Familiares de la víctima que llegaron a la escena del crimen manifestaron que el joven trabajaba para una empresa de limpieza que daba servicios al Hospital Zacamil, siempre ubicado en Mejicanos, y había salido a cobrar unos días de trabajo que le debían.
Sin embargo, dijeron desconocer si la intención del crimen había sido robarle, pues había salido de su casa ubicada en el pasaje El Cubo, cerca de donde fue atacado, antes del mediodía.
Agentes oculares y periciales de la Policía explicaron que Dennis recibió tres disparos en la cabeza, lo que le habría causado la muerte de manera instantánea.
El homicidio de Dennis forma parte de un alza de los homicidios ocurridos en El Salvador desde el viernes pasado. Las autoridades de la Fiscalía General de la República (FGR) y la corporación policial han reportado 76 asesinatos en esos cuatro días; un promedio diario de 19 casos, en ese lapso.
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El Tribunal Segundo contra el Crimen Organizado de San Miguel impuso penas de entre 8 y 155 años de prisión a 15 miembros de la Mara Salvatrucha, tras ser hallados culpables de cometer diversos delitos, entre ellos homicidio agravado, intento de homicidio y organizaciones terroristas.
Los condenados pertenecían a las clicas Molinos Locos Salvatruchos y Los Ángeles Locos Salvatruchos, donde desempeñaban distintos rangos como homeboys, chequeos y paros. La Fiscalía General de la República (FGR) presentó pruebas que fueron determinantes para lograr las condenas.
Uno de los crímenes más atroces atribuidos al grupo ocurrió en noviembre de 2017 en el cantón Las Trancas, distrito de Ozatlán, donde una mujer fue privada de libertad, llevada a un cerro, asesinada con arma de fuego, desmembrada y enterrada. Su cadáver fue localizado en junio de 2018. La víctima habría sido asesinada por ser pareja de un exmiembro retirado de la pandilla, según la FGR.
Éver Wilfredo Herrera Gómez, alias el Satánico, recibió la condena más severa: 155 años de prisión por cuatro homicidios agravados y un intento de homicidio. Otro de los sentenciados, Élmer Vladimir Rivas Ayala, alias el homeboy de la L.A, fue condenado a 42 años por homicidio agravado y participación en organizaciones terroristas.
Las autoridades reafirmaron su compromiso de continuar el combate frontal contra las estructuras criminales responsables de múltiples hechos de violencia en el país.