Internacionales
Temido cártel de la droga en México ya cuenta en sus filas con niñas sicarias

Rosalinda Carrillo Ochoa «La Estrella», capturada en 2012 y sentenciada a 15 años de prisión fue una de las primeras mujeres en convertirse en cabecilla de una célula del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), que se caracteriza por su crueldad contra el sexo femenino.
Sin embargo, en los últimos meses se ha intensificado la presencia de mujeres en los niveles más bajos de la organización, ya sea colaborando en los secuestros o como sicarias que son entrenadas desde muy corta edad.
El reclutamiento de mujeres menores de edad por parte del cártel comandado por Nemesio Oseguera «El Mencho» quedó comprobado en agosto pasado, cuando en el estado de Guanajuato detuvieron a una célula del grupo criminal. Entre los 16 detenidos se encontraban tres mujeres jóvenes de entre 18 y 20 años.
Aunque las jóvenes ya son mayores de edad, se presumen que estaban integradas al grupo criminal desde hace años, es decir, cuando todavía eran adolescentes.
Los cárteles reclutan a menores de edad para aprovechar un apartado de la ley en el que se indica que nadie es legalmente responsable antes de cumplir 14 años y después de los 18 reciben sentencias mínimas.
Por eso es que las organizaciones criminales reclutan a niños de entre 7 y 9 años para iniciarlos, con la intención de que entre los 16 y 16 ya puedan desempeñarse como sicarios.
En el caso de las mujeres, en muchos de las ocasiones son arrancadas de sus familias ya sea para integrarlas a las filas de la organización o para el tráfico sexual. Existe el registro de que en las zonas ocupadas por el crimen organizado son más altos los índices de delitos cometidos contra las mujeres como homicidio, extorsión, intimidación, violencia sexual y secuestro.
Un análisis de la Red por los Derechos de la Infancia en México (REDIM) sobre la violencia contra menores en el país comparó los números de niñas y mujeres adolescentes víctimas en los primeros trimestres de los años más violentos, 2018, 2019 y 2015, en los que resultaron 54, 51 y 47 niñas y jovencitas asesinadas, respectivamente.
Con el reclutamientos de niñas y jóvenes, el CJNG sigue los patrones establecidos por otros grupos criminales como La Línea, en Chihuahua y el Cártel del Noreste, quienes ya cuentan con células integradas únicamente por mujeres.
La Línea empezó a reclutar y entrenar a decenas de mujeres «jóvenes y guapas» como sicarias, reveló Rogelio Amaya, uno de los pistoleros de la organización luego de su captura.
«Son bonitas, adolescentes de buen ver, para engañar más a los contrarios», declaró ante autoridades mexicanas en 2010 y añadió que la mayoría tenían entre 18 y 20 años, las mayores apenas llegaban a los 30.
Las mujeres ya se habían integrado a los «comandos» del grupo criminal que peleaban contra sicarios del Cártel de Sinaloa para mantener el control de Ciudad Juárez. Aunque siempre están acompañadas de un hombre, su trabajo es similar y lo realizan con la misma efectividad que sus pares.
«Van en autos y llevan armas largas o cortas. Van acompañadas de hombres, ellas se bajan a hacer el trabajo», relató el sicario.
Otro pistolero del cártel detenido ese mismo año, Rosalío María Martínez, confesó la existencia de comandos exclusivos de mujeres que tenían distintas tareas que iban desde el narcomenudeo hasta asesinar a sus rivales.
El ejemplo más notorio de las niñas sicarias es Joselyn Alejandra Niño, una de las integrantes de Cártel de Las Flacas, quien en 2015 mostró una de las peores caras del narcotráfico, luego de ser ejecutada y descuartizada.
El cuerpo de «La Flaca», como también se le conocía fue encontrado cortado en pedacitos adentro de una hielera abandonada en el puente fronterizo entre Matamoros, Tamaulipas en México, y Brownsville, Texas, Estados Unidos. En el lugar también se encontró a otra mujer descuartizada y a un hombre decapitado.
Las Flacas fueron un cártel de jóvenes sicarias, físicamente muy parecidas, que operaban de manera independiente y que trabajan para distintas organizaciones criminales para asesinar rivales. Operaban principalmente en la zona norte de México en estados como Baja California, Nuevo León, Sonora y Tamaulipas.
Eran conocidas por ser jóvenes, delgadas que usaban chalecos antibalas, cadenas de oro colgando sobre el cuello, cabello peinado hacia atrás y lentes de sol sobre su cabeza.
Su apariencia casi infantil y su juventud las ayudaba a pasar desapercibidas entre sus víctimas.
Internacionales
Guatemala, con aumento de 36.2 % en las extorsiones

Las extorsiones en Guatemala aumentaron un 36.2 % en el primer bimestre del año respecto a los primeros dos meses de 2024. Las familias viven agobiadas por las cuotas mensuales que deben entregar a los pandilleros. La situación es complicada en el país, cuando los funcionarios de los centros penales facilitan favores a los internos y hay reportes de que estos operan extorsiones desde el interior de las prisiones.
Las estadísticas del informe sobre extorsiones del Observatorio de Violencia de la organización Diálogos indican que este año hubo 4,871 extorsiones, mientras que el año pasado, al cierre de los dos meses, hubo 3,576.
Los departamentos con mayores denuncias de extorsiones son Guatemala, Escuintla, San Marcos, Chimaltenango, Jutiapa y Alta Verapaz.
Pese a los operativos, allanamientos y detenciones de líderes de pandillas, las extorsiones incrementan cada año. Las denuncias de los primeros dos meses de 2025 se acercan al cierre de hace una década. El 2015 cerró con 5,151 extorsiones, pero el año pasado hubo un total de 25,151, la cifra más elevada de los últimos 10 años. El 2023 finalizó con 18,096 extorsiones, siendo la segunda más alta.
Cansados de esta situación, pobladores de la Ciudad Peronia, zona 8 del municipio de Villa Nueva, Guatemala, salieron el jueves pasado a las calles para marchar por la paz. Un día antes, la Fiscalía había revisado la documentación de los conductores para prevenir actividades delictivas.
«El objetivo principal de esta acción es fortalecer la seguridad de los pasajeros y con[1]ductores y prevenir delitos como la extorsión», afirmó la Fiscalía.
La semana pasada, la Dirección General del Sistema Penitenciario de Guatemala presentó una denuncia ante el ministerio público (Fiscalía) contra Mario Rolando Tax Charuc, director del Centro de Detención Preventiva para Hombres Restauración Constitucional, conocido popularmente como Pavoncito, por los delitos de extorsión e incumplimiento de deberes.
De acuerdo con la institución, existe evidencia de que el director otorgaba beneficios a los integrantes de la pandilla MS-13 dentro de la prisión a cambio de dinero. También lo responsabiliza de los ilícitos que ocurren dentro de las instalaciones, como la construcción de casas y apartamentos de lujo, revelaron medios de comunicación local.
Algunas viviendas incluso están equipadas con electrodomésticos.
El viernes, la Fiscalía contra el Delito de Extorsión llevó a cabo una requisa en la cárcel y localizó un radio transmisor, cable de fibra óptica, dispositivos de almacenamiento, boletas de depósitos bancarios, números de cuentas bancarias, listados con números telefónicos y la identificación del grupo criminal White Fence.
«El radiotransmisor era utilizado por los privados de libertad para recibir información desde las afueras del centro carcelario cuando se aproximaban las autoridades, ya sea del ministerio público o de la Policía Nacional Civil», compartió la Fiscalía.
Guatemala se encuentra en una situación crítica con los homicidios y extorsiones que lideran las pandillas.
Internacionales
Japón estima que cerca de 300,000 personas morirían en caso de un megaterremoto

Las autoridades actualizaron su anterior estimación, realizada en 2014, sobre las posibles consecuencias en el caso de que se produzca un terremoto a lo largo de la fosa de Nankai, al sur del país.
Esta fosa submarina de 800 kilómetros se extiende desde Shizuoka, al oeste de Tokio, hasta el extremo sur de la isla de Kyushu.
Es el lugar donde la placa tectónica oceánica del mar de Filipinas se desliza lentamente por debajo de la placa continental sobre la que se asienta Japón, en un proceso de subducción.
Las placas se atascan a medida que se mueven y amacenan grandes cantidades de energía que se libera cuando se sueltan, causando terremotos que pueden llegar a ser muy violentos.
El grupo de trabajo de gestión de desastres estima que hasta 215.000 personas morirían por un tsunami, 73.000 por el colapso de edificios y 9.000 por incendios.
Sin embargo, el número total de víctimas previsto (298.000) es inferior a la estimación de 2014, según la cual morirían hasta 323.000 personas.
En los últimos 1.400 años, se han producido megaterremotos en la fosa Nankai cada 100 o 200 años. El último se produjo en 1946.
Los científicos afirman que es extremadamente difícil predecir los sismos. Pero en enero, un grupo de expertos del gobierno afirmó que la probabilidad de que se produzca un megaterremoto de este tipo en los próximos 30 años aumentó ligeramente, con probabilidades de entre 75 a 82% de que ocurra.
Internacionales
Se diluye la esperanza de hallar sobrevivientes tres días después del sismo en Birmania

Las esperanzas de encontrar sobrevivientes entre los escombros se desvanecen este lunes tras el potente terremoto que mató a por lo menos 1.700 personas en Birmania y la vecina Tailandia.
En Mandalay, la segunda ciudad de Birmania, situada cerca del epicentro, algunos habitantes pasaron una tercera noche bajo a la intemperie. Muchos durmieron en medio de las carreteras, lo más lejos posible de los edificios.
Los esfuerzos de rescate bajaron de intensidad en esa ciudad central de Birmania con más de 1,7 millones de habitantes, en medio de condiciones difíciles y con temperaturas cercanas a los 40 ºC.
El fuerte calor acelera la descomposición de cuerpos, lo cual podría complicar su identificación.
La junta birmana declaró una semana de luto nacional y anunció que las banderas birmanas ondearán a media asta «en señal de compasión por la pérdida de vidas y los daños causados por el violentísimo terremoto».
Una escena de desesperación se vivió en un edificio de apartamentos colapsado la noche del domingo en Mandalay, cuando los rescatistas creyeron haber rescatado con vida a una mujer embarazada que pasó más de 55 horas entre los escombros.
Le amputaron una pierna para liberarla, pero tras sacarla fue declarada muerta.
«Intentamos hacer todo lo posible para salvarla», comentó un rescatista, añadiendo que había perdido demasiada sangre por la amputación.
Los fieles musulmanes se congregaron el lunes cerca de una mezquita destruida en la ciudad para la primera oración del Aíd al-Fitr, la festividad que se celebra después del mes de ayuno musulmán del Ramadán.
Este lunes se esperan cientos de funerales de víctimas.
El sismo inicial de magnitud 7,7 se registró la tarde del viernes cerca de Mandalay, seguido de una réplica, minutos después, de magnitud 6,7.
Los temblores colapsaron edificios, derribaron puentes y bloquearon carreteras en el centro de Birmania.
Pánico por réplicas
A lo largo del fin de semana se sintieron réplicas en Mandalay, donde los vecinos salían a las calles en pánico.
La Federación Internacional de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja (IFRC) lanzó este domingo un llamado de emergencia por más de 100 millones de dólares para ayudar a las víctimas.
Según la IFRC, las necesidades crecen cada hora, al tiempo que el calor y la cercanía de la temporada de lluvias aumentan el riesgo de «crisis secundarias».
El país del sudeste asiático de más de 50 millones de habitantes ya enfrentaba enormes desafíos desde antes del terremoto.
Birmania se ha visto arrasada por cuatro años de guerra civil tras el golpe militar de 2021.
Incluso después del sismo se han reportado combates esporádicos. Un grupo rebelde dijo el domingo a AFP que siete de sus combatientes murieron en un bombardeo poco antes de que se sintieran los temblores.
La guerra civil provocó el desplazamiento de unas 3,5 millones de personas, muchas de las cuales están al borde de la hambruna.
Colapso en Bangkok
En la capital tailandesa, Bangkok, a unos 1.000 km de Mandalay, siguen las operaciones por hallar sobrevivientes en el lugar donde colapsó un edificio en construcción de 30 pisos por el terremoto del viernes.
Al menos 18 personas murieron en la megalópolis tailandesa. Se registran además 33 heridos y 78 desaparecidos, según las autoridades de la ciudad.
La mayoría de los fallecidos en la torre colapsada eran trabajadores y gran parte de los desaparecidos habrían quedado atrapados bajo el cúmulo de escombros.
Los rescatistas trabajaron contra reloj el fin de semana en busca de sobrevivientes, utilizando excavadoras mecánicas para remover los escombros mientras las familias esperaban noticias de sus seres queridos.
Perros rastreadores y drones con imágenes térmicas buscaban señales de vida en el edificio colapsado, ubicado cerca del mercado Chatuchak, un sitio muy visitado por turistas.