“La disminución de los homicidios de alto impacto en El Salvador son innegables, irrefutables y tienen una clara tendencia a la baja debido al Plan Control Territorial” afirma el criminólogo, Ricardo Sosa, quien también labora como asesor en temas de Seguridad Pública.

Sosa explicó que las cifras que se registran en el país, avalan la efectividad de la apuesta en el rubro de este gobierno que está en la etapa 3 de su desarrollo: “El Plan Control Territorial contiene 7 fases de las cuales han lanzado 3 por parte del presidente Nayib Bukele, y está pendiente en financiamiento por parte de la Asamblea”.

Para el también conocedor en la materia y analista de la oenegé Crisis Group, Tiziano Breda, hay que atribuirle méritos a lo realizado desde el aparato de seguridad: “No descartamos que algunas medidas del Gobierno pueden favorecer a que se consolidara la reducción (homicidios) por las nuevas políticas carcelarias de mescolanza de diferentes pandillas. Mezclar las pandillas en las mismas celdas son decisiones que tienen su mérito”.

En el tema que ha estado en la palestra pública de los últimos días, sobre la presunta negociación del gobierno con grupos criminales que plantea un periódico digital, Ricardo Sosa es contundente: “En la administración del presidente Bukele no encuentro ninguna evidencia donde existan pactos o negociaciones (entre pandillas)”, afirma Sosa.

Por su parte Tiziano Breda agregó “falta confirmar el contenido de las conversaciones. Muchas de las cosas que se plantean en la nota quedan sin evidencia” dijo sobre lo que plantea la extensa nota del medio digital.

Sosa agrega otro elemento de contradicción que encuentró en la nota del medio: “Algo que me parece imposible es que una sola pandilla va a generar la baja de todos los delitos: feminicidios, desapariciones, extorsiones y homicidios”, dijo.