Recientemente, el diario Daily Mail publicó la historia de un escabroso caso que se registró en noviembre de 2016, el cual terminó con dos niños asesinados por su propio padre, el cual también terminó suicidándose tras ganar la lotería.

Días antes, la esposa del hombre en cuestión, Sally Stokes, se encontró el teléfono de su marido, David, en la cocina, y le dio curiosidad revisarlo. Fue así como descubrió que le había llegado un correo electrónico confirmándole una reservación en un hotel, y que además era para varias personas.

Fue así como descubrió que meses atrás, David había ganado un generoso premio de lotería y el dinero lo había estado gastando en prostitutas, drogas y en la compra de un auto.

Sally le contó a su hermano y a su suegro lo que estaba pasando; ambos lo encararon y le dijeron que ya habían llamado a la policía. David volvió a casa y le pidió perdón a su esposa, asegurándola que la amaba y le prometió que no volvería a engañarla. La mujer le pidió tiempo para pensar las cosas y esa noche le dejó encargados a sus hijos Adam, de 11 años, y Matthew, de 5, en lo que iba a platicar de dicha situación con su familia.

La mujer recordó que su matrimonio entró en crisis un par de meses antes cuando descubrió varios boletos de lotería dentro de una maleta junto con un teléfono celular. Esa vez, David le dijo que no había ganado nada y que no tenían dinero. Ella insistió en ver el teléfono pero su esposo terminó por destruirlo mientras discutían en la cocina.

Finalmente, Sally volvió a su casa alrededor de las 9 de la noche y encontró a su esposo en la cocina, quien le dio una taza de té, posteriormente subieron a su recámara y fue ahí cuando David golpeó a su mujer en la nuca y le puso una almohada sobre la cabeza con la que intentó ahogarla.

Sally logró liberarse y forcejeó con su marido, mientras le preguntaba en dónde se encontraban sus hijos; él le indicó que los niños los había encargado con unos amigos. El hombre intentó golpearla con un rodillo pero ella logró quitárselo y le pegó; escapó por su jardín y pudo pedir ayuda a sus vecinos.

Finalmente, la policía llegó a la casa y David, al sentirse acorralado, tomó un cuchillo y con este se quitó la vida. “Te he lastimado mucho. Nunca quise mentirte y prometerte que ya no lo haré”, escribió el hombre en una carta que encontraron en la vivienda.

Lo peor de todo fue cuando Sally descubrió a sus 2 hijos muertos, tomados de la mano, en una cama de la casa.

La mujer decidió hacer pública su historia para mostrarle al mundo cómo a veces, la puede cambiarte para mal la vida.