Internacionales
VIDEO DRAMÁTICO: Familias migrantes escapan de las pandillas en centroamérica y cruzan la frontera a toda costa

A pesar del riesgo de ser capturados, los alambres de púas y las aguas heladas, caravanas de migrantes cruzan la frontera de Estados Unidos en la frontera con Yuma, Arizona

Phoenix, Estados Unidos.- Entre alambres de púas y con niños en mano, caravanas de inmigrantes cruzan a pesar del alambrado de púas y las aguas heladas de un canal.
Impactantes videos muestran a un grupo de migrantes, una familia hondureña incluyendo niños y familias enteras, intentando cruzar a Estados Unidos, a pesar de las advertencias de los oficiales migratorios sobre los riesgos que enfrentaban.
Los videos dados a conocer este martes registran los hechos ocurridos a finales de diciembre en la frontera de Yuma, en el estado de Arizona.

En el primero de ellos se puede observar a un hombre zambullendo a una niña en el agua para cruzar la valla divisoria mientras el llanto de otra menor se escucha desde el otro lado de la frontera.
La niña se va a traumar, no la crucen
Se oye a una mujer desde el lado estadounidense en el video del que se hizo eco este miércoles la Casa Blanca en su cuenta de Twitter.

En el dramático vIdeo se puede ver cómo un inmigrante pide a una agente que le ayude para sacar a la niña del agua, pero la uniformada da un paso atrás y sigue grabando con un teléfono.
En el otro lado de la valla aparecen varios agentes mexicanos que intentan evitar este caso de tráfico de personas y desincentivan a los migrantes a cruzar a una niña y se oye como gritan «¡No cruce a la bebé!».
Ya en el lado estadounidense, una mujer, que las autoridades aseguran que era la tía de la menor, llora ante los gritos desconsolados de la niña y, a pesar de que los agentes de E.U. le recomiendan que regrese a México, decide entregarse a las autoridades.
En el otro vídeo, un grupo de familias con niños cruzan la frontera cerca de un canal durante la noche, mientras se oyen las sirenas de las patrullas fronterizas.

Se escuchan además los gritos de un oficial de la Patrulla Fronteriza que les alerta del peligro que supone cruzar a los niños por las púas de la alambrada.
«¡No hagan eso, mira el niño, cuidado con el niño, cuidado con el niño. Regrese, ya viene la policía!», grita el agente a unos indocumentados que hacen caso omiso y pasan con niños pequeños en brazos por el alambre de púas, en el que se quedan enganchados varios de ellos.
Las últimas estadísticas oficiales reflejan que entre octubre del año pasado y febrero pasado en Yuma han sido detenidos 17.578 inmigrantes, en contraste con los 5.319 aprehendidos en el mismo período del año pasado, un aumento que ha desbordado la capacidad operativa de las autoridades estadounidenses.
Dirigentes fronterizos han adelantado que la cifra de indocumentados detenidos por cruzar ilegalmente la frontera en marzo pasado podría alcanzar los 100.000 individuos, frente a los entre 50.000 y 60.000 que se registraron de media el año pasado mensualmente.
Internacionales
Embarazada resulta lesionada en intento de asalto en Ciudad de Guatemala

Una mujer embarazada de seis meses resultó herida de bala tras un intento de asalto registrado en la zona 9 de la Ciudad de Guatemala, según informó la Policía Nacional Civil (PNC).
El hecho ocurrió en la intersección de la 6ª avenida y 8ª calle, donde sujetos armados habrían interceptado a la víctima con intenciones de robo. La mujer fue identificada como Jimena Vickers, de 31 años, quien se desempeña como visitadora médica.
De acuerdo con versiones preliminares, los atacantes abrieron fuego luego de que Vickers se opusiera al asalto. En el parabrisas del vehículo, del lado del conductor, se observaron al menos tres impactos de bala.
La víctima fue auxiliada por cuerpos de socorro y trasladada a un centro asistencial. Su estado de salud, así como el del bebé que espera, no ha sido detallado por las autoridades.
La PNC inició un operativo en el sector para dar con los responsables, aunque hasta el momento no se reportan capturas.
Internacionales
Crisis humanitaria en Gaza deja a niños y madres gravemente afectados por la desnutrición en medio del conflicto

La organización Médicos Sin Fronteras (MSF) alertó este viernes que uno de cada cuatro niños entre seis meses y cinco años, así como mujeres embarazadas y lactantes atendidos en sus clínicas en Gaza, presenta signos de desnutrición, en lo que califican como una emergencia sanitaria y humanitaria de alto nivel.
En un comunicado, MSF acusó a las autoridades israelíes de usar deliberadamente el hambre como un arma de guerra. “Los propios pacientes y profesionales de la salud sufren de hambre”, señaló la ONG, que mantiene presencia médica en Ciudad de Gaza.
Caroline Willemen, coordinadora del proyecto de MSF en esa ciudad, aseguró que están recibiendo alrededor de 25 nuevos casos de desnutrición diariamente. Desde el 18 de mayo, los registros se han cuadruplicado y la desnutrición severa en menores de cinco años se ha triplicado.
MSF afirma que esta situación se debe a una “hambruna deliberada”, consecuencia directa del bloqueo impuesto por Israel sobre el enclave palestino. Aunque a finales de mayo se flexibilizó el cerco, las carencias de alimentos, medicinas y productos básicos persisten.
Israel, por su parte, responsabiliza a Hamas de manipular la ayuda humanitaria, acusándolo de apropiarse de suministros para revenderlos a precios desorbitados o de atacar a las personas que esperan recibir alimentos.
La ONG también denunció ataques en los centros de distribución de alimentos gestionados por la Fundación Humanitaria de Gaza (GHF), respaldada por Israel y Estados Unidos. “Estas distribuciones no son ayuda humanitaria, son crímenes de guerra cometidos a plena luz del día bajo el disfraz de compasión”, afirmó Mohammed Abu Mughaisib, coordinador médico adjunto de MSF en Gaza.
La ONU ha documentado más de 1.000 muertes desde finales de mayo en puntos de ayuda humanitaria, la mayoría cerca de los centros operados por la GHF.
Internacionales
Ecuador cierra el semestre más violento desde 2011 con más de 4,500 homicidios

Ecuador cerró el primer semestre de 2025 como el más violento de los últimos 14 años, al registrar 4,557 homicidios, lo que representa un aumento del 45 % respecto al mismo periodo de 2024 y un 22 % más en comparación con los primeros seis meses de 2023, según datos del Ministerio del Interior recopilados por el medio «Primicias».
Del total de muertes violentas, el 89 % (4,069 casos) fue cometido con armas de fuego, incluyendo pistolas, escopetas, ametralladoras y fusiles, lo que evidencia el creciente poder de fuego de los grupos criminales.
Mayo se posicionó como el mes más sangriento desde que se tiene registro, con 915 homicidios, superando incluso los 831 asesinatos ocurridos en octubre de 2023. En promedio, al menos 30 personas fueron asesinadas cada día durante el primer semestre del año. En junio, aunque hubo una leve reducción, se contabilizaron 548 crímenes.
Entre enero y mayo, 70 cantones del país registraron un aumento en muertes violentas respecto al mismo periodo del año anterior. En estos territorios se concentró el 90 % de los homicidios registrados, es decir, un total de 3,578.
Frente a esta escalada de violencia, el gobierno de Daniel Noboa ha decretado estados de excepción en varias provincias —Guayas, Los Ríos, Manabí, Orellana, Santa Elena, El Oro y Sucumbíos—, en dos cantones de Quito y en el sistema penitenciario nacional. Sin embargo, estas medidas han sido insuficientes para frenar la criminalidad.
El más reciente estado de excepción, declarado el 12 de abril mediante el Decreto 599, fue parcialmente aprobado ayer por la Corte Constitucional, que consideró inconstitucional aplicar la medida en todos los centros penitenciarios y en el cantón Camilo Ponce Enríquez (Azuay), al no evidenciarse hechos que justifiquen su inclusión.
Además, la Corte rechazó la suspensión del derecho a reunión, las inspecciones y requisas sin orden judicial, así como la intervención directa de las Fuerzas Armadas, al señalar que estas acciones pueden ejecutarse dentro del marco legal ordinario.
Pese a ello, se mantuvieron restricciones como la suspensión del derecho a la libertad de tránsito, la inviolabilidad del domicilio y el derecho a la correspondencia, permitiendo a la fuerza pública realizar allanamientos y revisar mensajes dirigidos a privados de libertad.
El alto índice de homicidios refleja la profunda crisis de seguridad que atraviesa Ecuador, donde el crimen organizado y las bandas armadas continúan desafiando la capacidad del Estado para contener la violencia.