Una hembra de rinoceronte blanco fue brutalmente muerta en la reserva privada de Kragga Kamma (Cabo Oriental, Sudáfrica) por cazadores furtivos, que acabaron con su vida para extirparle un centímetro de cuerno, dejando huérfana a una pequeña cría de 16 meses, informa el parque africano en su cuenta de Facebook.

El animal era un ejemplar de 20 años de edad cuyo cuerno había sido recortado por los cuidadores de la reserva apenas una semana antes del ataque, en un intento de protegerlo frente a la caza ilegal.

«Como todos los dueños de rinocerontes, sabíamos que el ataque de los cazadores furtivos simplemente era una cuestión de tiempo», expresaron desde el parque Kragga Kamma.

«Esto es tan irreal, todo por un centímetro de cuerno. No podemos comprender semejante pérdida», escribió en su perfil de Facebook Ayesha Cantor, administradora de la reserva, que agradeció los mensajes de apoyo recibidos: «Gracias, queridos amigos, sabemos que están tan devastados como nosotros».

Tras la muerte de este raro animal, perteneciente a una especie en peligro de extinción, a Tank, su joven cría, se la vio muy afligida por la pérdida de su madre. El pequeño, que se ha quedado sin leche materna, intentaba en los días posteriores amigarse con otra hembra y su cría,.

A su vez, los cuidadores de la reserva denunciaron el hecho ante las autoridades y comenzaron a alimentar a Tank con un suplemento dietario.