La policía brasileña busca a un grupo de buzos al servicio de una organización narco que cargaba droga en los compartimientos subacuáticos de barcos atracados en Brasil, cuyo destino era una red de tráfico internacional.

Los «individuos expertos en buceo submarino» introducían cocaína y marihuana en el cofre de mar -conocido como «sea chest»- de navíos fondeados en puertos brasileños, especialmente el de Santos, en el litoral del estado de Sao Paulo, informó la Policía Federal en un comunicado.

Los buzos, cuyo número no fue precisado, forman parte de un esquema manejado por el Primeiro Comando da Capital (PCC), la mayor organización criminal del país, con base en Sao Paulo, dijo este viernes una fuente policial a la AFP.

El PCC también «contaba con apoyo de una red de buzos alrededor del mundo para retirar la droga en otros países» de Europa y Asia, según la nota.

Los buzos están siendo buscados luego de que la policía ejecutó el jueves la «Operación Taeguk», que llevó al arresto en Sao Paulo de cinco sospechosos. Otra persona señalada de formar parte de la trama ya estaba presa por otro caso. Cuatro están prófugas.

«Dos detenidos actuaban observando la vigilancia policial en el puerto de Santos, uno era piloto de una embarcación que llevaba droga, uno obtenía datos de los barcos que llegaban a Santos, uno daba apoyo operativo y logístico, y uno actuó en un envío de 400 kilos de marihuana», informó la policía a la AFP.

Durante 2024, la policía decomisó más de una tonelada de cocaína y marihuana que iba a ser enviada bajo esta modalidad. La pesquisa determinó que la droga iba a ser trasladada en navíos de gran calado hacia los mercados europeo y asiático.

La investigación en Brasil contó con el apoyo de las policías de países como Corea del Sur, China y España.

Los sospechosos pueden responder por cargos con penas de hasta 35 años de cárcel, como tráfico trasnacional de drogas, asociación para fines de tráfico y organización delictiva.