El terror se ha apoderado de varias regiones de México debido a la injerencia del crimen organizado, aunque las autoridades hacen grandes esfuerzos por combatirlo, los sicarios idean maquiavélicas formas para atacar. En Celaya, Guanajuato, se ha registrado un modus operandi alarmante, pues los delincuentes hacen llamadas falsas al 911 y cuando policías acuden a atender la situación son emboscados.

De acuerdo con Jesús Rivera Peralta, secretario de Seguridad Pública de Celaya, en todo este año se han registrado cinco ataques con esta manera de operar. Al respecto, el sitio Telediario detalla que los grupos criminales utilizan a mujeres y adultos mayores para realizar llamadas falsas de emergencia al 911 reportando ataques armados inexistentes.

Según el medio mexicano, detrás de esta situación está uno de los grupos criminales con mayor presencia en Guanajuato, el Cártel de Santa Rosa de Lima, aunque no es la única organización que realiza estas acciones, pues otras que operan en la zona también recurren a ellas.

Los datos indican que, del total de llamadas que reciben diariamente los números de emergencia, por lo menos 923 son falsas y de estas la mayoría provienen de comunidades del sur del municipio, argumentando ataques armados y hechos delictivos de alto impacto, pero al llegar los policías son emboscados.

“El 71% de las llamadas de emergencia que recibimos no son procedentes, únicamente el 29% tienen algún positivo y muchas de ellas son distractores”, señaló el secretario de Seguridad Pública de Celaya.

El hecho más reciente de este tipo del que se tiene registro ocurrió la madrugada del pasado sábado, cuando hombres armados atacaron a policías municipales de Celaya que atendían un reporte de emergencia, y uno de ellos resultó lesionado por las esquirlas del impacto de bala.

Ante estas situaciones, el secretario explicó que la corporación ha reforzado sus protocolos internos para identificar los alertamientos y coordinarse con el área de análisis del C4. Además, dijo que los elementos ahora siempre van acompañados de un conductor, un acompañante y otra patrulla, dependiendo del lugar, la incidencia, la hora, el tipo de alerta y el número de llamadas.