Un niño de 13 años de edad, murió aplastado luego de que el camión de la basura en el que se quedó a dormir, levantara el contenedor para vaciar los desechos en un bote.

Se trata de Spencer, de 13 años, quien vivía en la ciudad de Port Lincoln, Australia, antes de ser aplastado por el camión de basura.

De acuerdo con información de medios locales, el niño se encontraba dormido en el camión de la basura junto con otros dos amigos de 11 y 12 años, con quienes estaba en una “aventura”.

Luego de que se dieran a conocer los hechos, la familia del menor salió a explicar porqué el niño dormía en las calles y mencionaron que el pequeño Spencer no había regresado a casa para quedarse en una “aventura” con sus dos amigos.

Así mismo, se dio a conocer que los tres niños estuvieron deambulando por las calles durante varias horas del pasado lunes 10 de mayo hasta que el frío y las lluvias los obligaron a buscar refugio en un camión de basura de un McDonalds, donde durmió el niño para no dejar solos a sus amigos.

“Spencer tenía un hogar lleno de amor al que ir, muchas tías, tíos, abuelas y abuelos viven no muy lejos del pueblo”, escribió uno de sus familiares en redes sociales.

DESPIDEN A SPENCER

Este 12 de mayo, los familiares de Spencer llegaron al lugar en donde murió el niño y colocaron arreglos florales, mensajes de despedida y juguetes. Minutos después se le sumaron más familiares y amigos de Spencer, quienes mencionaron que el niño “murió como un héroe”.