Judicial
Psiquiatra drogaba a su paciente para intentar abusar de ella: Mujer al final lo descubrió y lo denunció
Un psiquiatra del hospital San Rafael se encuentra tras las rejas luego de haber abusado sexualmente de una de sus pacientes quien lo descubrió tocando sus piernas y pechos durante una sesión terapéutica, tras ser sorprendido el imputado confesó su atracción a la mujer a quien le expresó que había actuado de esa forma esperando ser correspondido.
Luego de tres sesiones, la mujer comenzó a sospechar que su psiquiatra abusaba sexualmente de ella ideando un plan para confirmar lo que creía era un sueño y que tiene tras las rejas al médico quien anteriormente había sido procesado por ser miembro de una banda de roba carros.
En su defensa el imputado aseguró que fue la atracción a la mujer lo que lo llevaron a actuar de esa manera, además, vía mensajes de texto el hombre le pidió disculpas a su víctima quien no se imaginó iba a reaccionar de esa manera.
Flor (nombre modificado por seguridad) fue atendida por el doctor Sol Schaeuffler, de 45 años, a quien le expuso que experimentaba trastornos de ansiedad que no le permitían tener tranquilidad en su vida. Alegando que su caso merecía una mejor atención, el doctor le sugirió a la mujer que llegara a su consultorio privado que está ubicado en la colonia Escalón.
Según el expediente judicial, el 9 de febrero del 2017, la mujer llegó al consultorio del doctor quien le recetó un cóctel de medicamentos compuesto de Quetiapina, bronazepam, venlafaxina, esto previo a someterla a terapias.
Una hora y media más tarde la consulta finalizó, no obstante, Flor no se sentía bien ya que la dosis la había dejado somnolienta y mareada por lo que le escribió al psiquiatra quien le indicó que se trataban de efectos secundarios.
Creyendo en el doctor, Flor acudió a una nueva cita en la que el galeno le recomendó una psicoterapia, la cual consistía en inducir a la paciente a un estado de relajación a través de la meditación.
Acompañada de un amigo que la esperaba fuera del consultorio, la mujer tomó una pastilla de Olanzapina y recibió indicaciones del médico: “Cierre los ojos y comience a decir ‘me siento bien, me siento tranquila, me siento en paz”.
Mientras la mujer repetía en su mente una y otra vez lo señalado se quedó dormida; la mujer dice recordar que tuvo un sueño extraño: “me tocaba las piernas, mis partes íntimas, mis pechos”, manifestó con un tono inquietante.
Terminada la sesión, el estado de la víctima no era el mejor y su acompañante lo notó por lo que al día siguiente intentó comunicarse con Flor pero esta no le respondía por lo que acudió hasta su casa para verificar el estado de la mujer quien tampoco atendió los llamados a la puerta de su casa.
Finalmente, el amigo de la mujer logró abrir una ventana en la residencia y logró entrar, encontrando a Flor en la misma posición que la había dejado un día antes, algo que preocupó al hombre y a los otros amigos que acudieron al lugar.
Las sospechas
El relato de sus amistades alertó a la mujer quien desde la primer sesión tuvo la extraña sensación que su psiquiatra la había tocado, algo que la llevó a idear un plan para descubrir lo que pasaba cuando tomaba los medicamentos.
El 17 de febrero, Flor acudió a una nueva cita con el psiquiatra quien le indicó que iban a realizar la misma rutina que la anterior sesión. Incluso, el médico accedió a cambiarle los medicamentos a su paciente ya que esta le explicó que los otros le habían hecho daño.
Pero la petición de Flor solo era parte de su plan para que Sol no se percatara de lo que estaba ocurriendo, la mujer tomó la pastilla con el vaso con agua -del que nunca supo el nombre real- pero cuando el doctor se dio la vuelta ella ocultó la pastilla y solamente se tomó el agua.
Recostada sobre una cama, Flor comenzó a repetir las oraciones citadas por el imputado quien confiado que tenía drogada a su víctima le comenzó a tocar las piernas y los pechos. Inmediatamente la mujer se levantó furiosa.
Sorprendido por la inesperada reacción, el médico comenzó a pedirle disculpas a la víctima confesándole que lo había hecho por sentir una fuerte atracción por su belleza y que era diferente al resto de pacientes que atendía.
“Pensé que no se iba a molestar”
Pasaron 15 minutos, Flor se sentía acorralada por su agresor pero logró llegar a su vehículo para salir del lugar. Sin embargo, el acoso de Sol continuaba vía WhatsApp con mensajes en los que insistía en pedirle perdón.
-“¿Qué hice yo para que usted me tocara sin permiso?”, le reclamó.
-“Nada, lo siento mucho. Disculpe de todo corazón”, le respondió.
-“¿Usted quería que yo supiera que me estaba tocando?”, le volvió a recalcar la angustiada mujer.
-“Pensé que no se iba a molestar”, le respondió.
Según la víctima, lo sucedido provocó que su ansiedad y depresión se hicieran más intensos. Fue hasta el 30 de noviembre de 2017 cuando el psiquiatra fue detenido en la dirección del hospital San Rafael y enviado a Centro Penitenciario “La Esperanza” donde ha permanecido recluido.
“No había puesto la denuncia por sentirme avergonzada”, confesó a las autoridades la mujer quien espera que se celebre el juicio en el Juzgado Quinto de Sentencia de San Salvador para ratificar los hechos.
La audiencia está programada para el 19 de septiembre del 2018.
Por: El Salvador Times.
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Prisión para pandillero que obligó a familia de Panchimalco a abandonar su vivienda
Imagen de referencia
El Tribunal Sexto de Sentencia de San Salvador condenó a 12 años de cárcel a Julio Adalberto Ramírez Pérez del delito de limitación ilegal a la libertad de circulación. Además, el Tribunal ordenó a Ramírez Pérez pagar una indemnización a la víctima como reparación por el daño emocional causado.
La víctima relató que el 12 de julio de 2020, mientras caminaba por la calle principal del cantón Los Pajales en Panchimalco, fue interceptado por cuatro sujetos pertenecientes a la Mara Salvatrucha. Bajo amenazas de muerte, los terroristas le exigieron a él y a su familia que abandonaran su vivienda, acusándolo de colaborar con la Policía Nacional Civil.
Todos los sujetos portaban armas de fuego. Ramírez Pérez, en particular, apuntó con su arma a la cabeza de la víctima y la amenazó de muerte, diciéndole que no sería el primero en morir si no obedecía. Aterrorizado por las amenazas y temiendo por la seguridad de su familia, la víctima se vio obligado a abandonar su hogar.
El reporte detalla que uno de los cuatro pandilleros involucrados en el hecho falleció, por lo que el proceso en su contra fue sobreseído definitivamente. Los otros dos pandilleros ya fueron condenados por este mismo delito en juicios separados.
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Pandillero enfrenta juicio por asesinar a siete personas en La Paz
El pandillero de la 18 José Abel Aguirre Hernández, es enjuiciado por haber asesinado a dos mujeres, a cuatro miembros de una familia y a un jornalero, en San Luis La Herradura, departamento de La Paz.
Los dos feminicidios los consumó en el 2015, y con respecto a la masacre de la familia, las pesquisas que la Fiscalía General de la República realizó determinaron que un cabecilla de la pandilla ordenó el múltiple crimen.
El móvil fue porque un miembro de la familia había sido testigo de un caso en contra del cabecilla de la pandilla 18 y por eso pidió que lo asesinaran junto a su familia.
«Fiscalía cuenta en esta oportunidad con suficientes elementos de prueba, tanto testimonial, documental y pericial que sustentan la acusación en contra de esta persona y se está solicitando una sentencia condenatoria y que se le imponga a esta persona las penas más gravosas por cada uno de los delitos cometidos», manifestó un fiscal.
El Tribunal Quinto contra el Crimen Organizado de San Salvador, revisará toda la prueba y escuchará la declaración de testigos que la Fiscalía ha ofrecido en contra del pandillero de la facción revolucionaria de la 18.
Aguirre Hernández se había dedicado a cometer una serie de delitos en contra de la integridad y afectar patrimonialmente a personas de varios distritos del departamento de La Paz, según las indagaciones efectuadas por policías bajo la dirección de la Fiscalía.
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Fidel Zavala deberá regresar más de $50,000 a sus víctimas
El Tribunal 3.º de Sentencia de San Salvador instaló hoy la vista pública en contra de Fidel Antonio Zavala Pérez, procesado por el delito de estafa en perjuicio de cuatro víctimas, a quienes adeuda un monto total aproximado a los $50,000.
La audiencia se declaró por interrumpida, dado que el imputado promete pagar lo estafado el próximo 18 de diciembre, fecha en que se instalará de nuevo el juicio. El fallo del juez dependerá del cumplimento de dicho pago.
Fidel Antonio Zavala Pérez es acusado por la Fiscalía General de la República, tras la denuncia presentada por cuatro personas que lo relacionaron con una promesa de inversión de capital en el extranjero y en la bolsa de valores. A cambio de realizar depósitos mensuales, les garantizaba utilidades y mayores ganancias, en función del monto invertido. Las víctimas aportaron sumas que oscilan entre los $10,000 y $15,000, alcanzando un total de lo estafado que sobrepasa los $50,000. No obstante, con el tiempo, lo único que recibieron fueron evasivas, lo que motivó la denuncia antes las autoridades.