Tecnología
Cómo liberar espacio en un celular a través de la aplicación Google Files
Las aplicaciones de la suite de productividad de Google, como Google Files, Docs, Sheets Slides, comparten un generoso almacenamiento de 15 GB con el resto de los servicios de Google que se puede utilizar.
Una de las aplicaciones de Google que puede ser muy útil es Google Files, que ayudará a liberar espacio en un teléfono inteligente de una forma muy fácil.
¿Qué es Google Files?
Se trata de una app creada por el mismo Google, diseñada especialmente para que nos sea mucho más fácil eliminar archivos no deseados, visualizar por categorías aquello que el usuario almacena, y hasta permite transferir archivos de forma más rápida.
Esta aplicación de Google se puede descargar de forma gratuita desde Google Play Store.
La aplicación Google Files facilita la limpieza de un smarhpone con un solo clic. Para ello, hay que hacer los siguientes pasos:
- Cuando la aplicación está abierta, lo primero que vemos es la pestaña ‘Explorar’, donde se puede ver en detalle los tipos de archivos guardados y otras opciones.
- Ahora hay que ir a la pestaña ‘Limpiar’, que muestra sugerencias que se pueden eliminar, así como una descripción detallada de los archivos que se tienen tanto en la memoria del teléfono móvil como en la tarjeta microSD, si está presente en el mismo.
- Para eliminar el contenido recomendado, hay que pulsar en el botón ‘Limpiar’.
- Los archivos sugeridos o seleccionados se eliminarán automáticamente.
Siempre hay que recordar que el usuario puede revisar manualmente todos los archivos para asegurarse de eliminar los que realmente no necesita.
Tecnología
Elon Musk presenta denuncia contra OpenAI por incumplimiento de acuerdo inicial
Según documentos presentados el jueves en un tribunal de San Francisco, consultados el viernes por AFP, Musk acusa a OpenAI -que se alió con Microsoft- de haber incumplido el acuerdo inicial para el desarrollo de OpenAI, que debía seguir siendo una organización sin fines de lucro que trabajara por el bien de la humanidad.
Musk cofundó OpenAI en 2015 con Sam Altman, entre otros, con estatus de organización sin fines de lucro que trabaja en programas de inteligencia artificial de «código abierto» (accesible, editable, utilizable y redistribuible para todos), para evitar que Google domine esta tecnología importante.
Partió de OpenAI en 2018 y ahora es uno de los más critican la empresa.
Musk también fundó en 2023 su propia compañía de inteligencia artificial, Xai.
OpenAI no hizo público el código de su último modelo de lenguaje GPT 4, «rompiendo el contrato original», alegan los abogados de Musk en la queja.
«A diferencia del acuerdo inicial, los demandados optaron por utilizar GPT 4 no por el bien de la humanidad, sino como tecnología exclusiva para maximizar los beneficios de la empresa más grande del mundo», es decir, Microsoft.
Microsoft prometió 13.000 millones de dólares en inversiones a OpenAI.
Desde entonces, Altman reorientó OpenAI hacia una trayectoria lucrativa, por lo que fue despedido por una parte de la junta en noviembre.
Con el apoyo de Microsoft, el jefe de OpenAI fue reincorporado cinco días después.
Elon Musk reclama que GPT 4 sea excluido de la licencia concedida por OpenAI a Microsoft.
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Autos eléctricos chinos se abren paso en América
Al comienzo del Año Nuevo lunar chino, una embarcación con 214 autobuses totalmente eléctricos de la compañía china Yutong llegó a Chile, y se espera que los vehículos entren en operación en la capital chilena a finales de febrero para satisfacer las necesidades de transporte público metropolitano. En México, otro país de la región, se lanzó en enero de 2024 el modelo híbrido BYD Song Plus, con un amplio rango de crucero de más de 1,000 kilómetros.
En términos de infraestructura, México ha comenzado su transformación hacia la electrificación y BYD promoverá cambios en los viajes eléctricos locales teniendo en cuenta tanto la economía como la protección medioambiental, explicó Stella Li, vicepresidenta ejecutiva de BYD Co., Ltd., y presidenta de BYD Américas.
Actualmente, no es nada extraño que chilenos y mexicanos vean autos de marcas chinas en las carreteras de sus ciudades. En los últimos años, las exportaciones de automóviles de China, impulsadas por los vehículos de nueva energía, han experimentado una enorme expansión, y las compañías del sector tanto tradicionales como emergentes se han esforzado por ingresar en mercados extranjeros. Según datos de la Asociación de Fabricantes de Automóviles de China (AFAC), las exportaciones de vehículos del país durante enero mantuvieron la tendencia de crecimiento de 2023, de más del 40 %.
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Estaba tan harto del reggaetón de su vecino que inventó un aparato para «hackear» su altavoz
Cuando tu vecino hace un ruido excesivo, tienes varias formas de solucionar este problema. Por un lado, puedes hacerlo de manera amistosa, indicándole con toda la educación del mundo que se está colando y que está molestando al resto de personas que viven en el bloque. Si no atiende a razones y el ruido es tan excesivo que te impide hacer vida en casa, también es un tema que puedes trasladar a la policía para presentar una denuncia. Junto a ello también puedes insonorizar tu piso de diversas formas, algunas más costosas que otras.
No obstante, este inventor y programador ha recurrido a una solución algo menos ética pero efectiva: hackear el altavoz de su vecino. Y es que tras sufrir el reggaetón de su vecino a todo volumen desde las nueve de la mañana, decidió construir un dispositivo para manipular el funcionamiento de los altavoces bluetooth de su vecino con una Raspberry Pi.
Este conocido emprendedor tecnológico de Buenos Aires, y autor de novelas como El Sueño Colbert o La Gran Monterrey, de nombre Roni Bandini, explicó cómo realizó todo el proceso a partir de un artículo en Medium. Tal y como menciona, se inspiró en el viejo TV-B-Gone, que se trataba de un pequeño dispositivo del tamaño de un mando de garaje con un botón para apagar televisores en bares y restaurantes. De hecho, su pequeño proyecto se denomina ‘Reggaetón-Be-Gone’.
El dispositivo de Bandini está entrenado para poder detectar cualquier canción de reggaetón y apagar o interferir la señal del altavoz para que la música deje de sonar tan alta. Su primer paso fue entrenar a una IA para que lograse reconocer este género. Para ello bastó con descargar varias canciones y desarrollar un algoritmo de clasificación. El modelo fue creado para Linux y procesadores ARM, por lo que pudo integrarlo en una sencilla Raspberry Pi.
Bandini conectó la placa a una pequeña pantalla OLED y lo encapsuló todo para darle un toque más vistoso, junto a un botón para poder hacer funcionar el aparato. Además de haber documentado sus pasos en su artículo de Medium, también subió el modelo a Github para que más personas pudieran probar su invento.
El modelo es capaz de detectar los patrones del reggaetón y actuar cuando se rebasa un límite de sonido establecido, según explica Bandini. Para ello, el invento determina el volumen de destino y lo reduce hasta alcanzar el límite de la tasa de decibelios que se haya establecido. El invento es capaz de interferir en la señal para reducir el sonido hasta que sea inapreciable para la persona que vive en un piso inferior o superior.
Superado el umbral del algoritmo, el modelo es capaz de hacer uso de los comandos rfcomm y l2ping hacia la dirección MAC del altavoz bluetooth para enviar solicitudes al dispositivo y atacar la señal bluetooth, reduciendo su eficacia o desconectándola por completo.
A pesar de que es una vía muy ingeniosa por parte de este programador, la realidad es que la eficacia del dispositivo no resultó tan exitosa como esperaba Bandini. Y es que los obstáculos del piso, como las paredes y la lejanía de la conexión, hacían mella en el proceso de interferencia. Además, si el altavoz se movía de lugar a otro punto más alejado, el sistema deja de funcionar, algo que es justo lo que ocurrió según explicaba Bandini en el texto.
Si bien se trata de una solución realmente ingeniosa, debemos también señalar sus implicaciones éticas y legales, ya que este proceso consiste en atacar o interferir la señal de un dispositivo completamente ajeno.
La situación es especialmente específica y por tanto no se refleja en ningún marco legislativo, pero sí podemos concluir que se trata de un caso similar al de utilizar inhibidores de frecuencia, dispositivos que solamente pueden utilizar las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad y Administraciones públicas autorizadas según la ley. También podemos trasladar esta situación a la de robarle la contraseña del WiFi al vecino, algo que sin tener consecuencias tan graves, también está estipulado como un acto ilegal en la legislación vigente según viene reflejado en el artículo 256 del Código Penal.