Vida
ENTÉRATE: ¿Qué le pasa a nuestro cuerpo si dejamos de tener sexo?

El cuerpo humano está planificado para beneficiarse y gozar del sexo y, sin embargo, las personas pasan por “períodos de sequía» en la cama por todo tipo de razones. Pero si ese paréntesis de inactividad se extiende el tiempo suficiente, puede tener un efecto en el cuerpo y en la mente de las personas.
La forma en la que no tener relaciones sexuales puede afectar el cuerpo varía según la salud o la edad de las personas. En el caso de las personas sanas que solo han dejado de tener relaciones sexuales debido a la falta de una pareja sexual o como consecuencia de una elección consciente (y no por alguna otra razón física), podrían experimentar algunos cambios físicos y psíquicos perjudiciales. Entre ellos, aquellos que se abstienen del sexo, comienzan a sentirse más lentos, con menos vitalidad y hambrientos de experiencias sexuales.
El sexo es en parte físico y en parte mental. Cuando las personas tienen relaciones sexuales, generalmente tienen contacto piel con piel, y este tipo de contacto es la forma primordial en la que nosotros, como humanos, nos consolamos. La conexión sexual regula el estado de ánimo mediante la liberación de la hormona del bienestar, la oxitocina. El sexo puede ayudar a estimular el espíritu a través de las endorfinas que elevan el estado de ánimo. Y sin el beneficio de estos estímulos naturales, las personas pueden ser propensas a sentirse más deprimidas.
“El encuentro sexual es una parte fundamental de la vida interpersonal. Sentimos el deseo, la intensidad del amor y del placer, nos entregamos al otro sin perder la individualidad y tenemos la capacidad innata de proyectar la vida en compañía. En síntesis: el gran desafío de ser singulares en una experiencia íntima compartida. Si esa fuerza llamada libido es inherente a lo humano, la represión o sublimación de la misma son adquiridas. La vida sin sexo tiene sus consecuencias fisiológicas y anímicas», explicó Walter Ghedin, médico psiquiatra y sexólogo.
Menos sexo, menos defensas

Según la revista médica Frontiers in Immunology, las relaciones sexuales regulares mejoran el sistema inmunológico y preparan al cuerpo para combatir las enfermedades mediante la liberación de endorfinas.
Para Beatriz Literat, médica sexóloga clínica y ginecóloga del Departamento de Gineco-Sexo-Estética de Halitus Instituto Médico, la experiencia sexual es “el conjunto de emociones, sensaciones corporales, intenciones y percepciones sobre la otra persona que promueven la activación de sus sentidos y emociones”. «Sentirse validado, seguro, comprendido y el hecho de tener la posibilidad de poder brindar lo mismo a un compañero genera un estado de enorme bienestar. Esto es, en definitiva, lo que beneficia a las personas y activa su sistema inmunológico”, indicó la especialista.
El estímulo erótico incrementa los niveles de hormonas sexuales estimulando el deseo y las ganas de conexión corporal. Los neurotransmisores que más influyen en la erótica son la dopamina, la noradrenalina y niveles adecuados de serotonina. “Por los primeros, aumenta el deseo y se predispone al cuerpo a tener más energía y buen tono muscular; la serotonina mejora el ánimo y permite que nos concentremos mejor en la conexión erótica (reduce la anticipación ansiosa, sobre todo en personas que temen “fallar” y se exigen complacer al otro)”, aseveró Ghedin.
Este influjo de sustancias impacta en forma positiva en la confianza y en la relación con el propio cuerpo. La persona que tiene una vida sexual activa y satisfactoria recibe, cada vez que lo realiza, aportes benéficos. El sexo y la sexualidad son un alimento para la estima y la valoración personal. Sentirse bien con uno mismo es el primer paso para estar bien con el otro y para afrontar mejor la vida en pareja.
Menos lubricación y debilitación en las paredes vaginales

En las mujeres que ingresan a la menopausia, no tener penetración vaginal puede implicar que las paredes vaginales pierdan su grosor y provoquen (en el caso de que alguna vez aparezcan) relaciones sexuales dolorosas. Según la Sociedad Norteamericana de Menopausia, las relaciones sexuales regulares son importantes para la salud vaginal después de la menopausia. Las mujeres mayores que no tienen relaciones sexuales tienen más probabilidades de afinar y resecar los tejidos.
De la misma manera, el pene tiene musculatura y con la escasez de las relaciones sexuales se puede generar en ella una atrofia. “El tiempo que tarda en producirse la atrofia es muy propio de cada persona. Para poder ejercitar la sexualidad no hay nada mejor que la automasturbación, el autoconocimiento, el explorar las zonas que nos dan placer y descubrir nuevas también. El coito regular protege contra el desarrollo de la disfunción eréctil y en el caso de las mujeres las protege contra la atrofia vaginal.El entrenamiento es esencial, la irrigación sanguínea siempre ayuda”, sostuvo en diálogo con este medio Mariana Kersz, psicóloga especialista en terapia de parejas y sexóloga.
Al igual que con el adelgazamiento de las paredes vaginales, en mujeres mayores la vagina también puede tener dificultades para volver a lubricarse. Esto sucede a medida que las mujeres envejecen debido a la falta de hormonas como el estrógeno. Si se toma a una mujer joven de 20 o 30 años como ejemplo, esto no ocurrirá debido a que sus organismos todavía producen estrógeno y se aseguran de que esos tejidos se mantengan saludables, elásticos y lubricados mientras no tenga relaciones sexuales. Sin embargo, la lubricación vaginal disminuye con la edad, y si las personas no se encienden a través del placer propio, libros eróticos, videos o una pareja, puede comenzar a disminuir más rápidamente.
Las endorfinas que se obtienen de los orgasmos ayudan a lidiar con los calambres menstruales. Sorprendentemente, el sexo puede ayudar a aliviar los calambres durante el período. El útero es un músculo y a muchas mujeres el orgasmo les provoca una contracción uterina, lo que provoca que la sangre se expulse más rápidamente, lo que a su vez disminuye los calambres menstruales. Además, el aumento en las endorfinas también ayuda a combatir este fenómeno.
La sexualidad, un gran aliado contra el estrés

Como consecuencia de la ausencia de secreción de felicidad que genera el contacto humano se ha demostrado un aumento en los niveles de estrés. Esta tensión se traduce en un aumento de la presión sanguínea y del cortisol, hormona que se libera como consecuencia del agobio y la angustia o depresión. Sin embargo, si bien las investigaciones han demostrado que la depresión y la falta de sexo están vinculadas, esto refleja una asociación, no causa y efecto. Si una persona sana deja de tener relaciones sexuales, no se deprimirá por eso. La falta específica de actividad sexual no va a causar depresión clínica, a pesar de la alta correlación.
El acto sexual regular contribuye a que dos personas se sientan emocionalmente más cercanas, lo que abre la puerta a una mejor comunicación. Las parejas que tienen relaciones sexuales con más frecuencia tienden a decir que son más felices que las que lo hacen con menor frecuencia. “No se trata de tener maratones sexuales, sino que los beneficios de la actividad sexual se obtienen cuando esta se realiza con parejas en las cuales existe un vínculo amoroso y la seguridad de no correr riesgos de contagio de ETS”, concluyó Literat.
Pasar mucho tiempo sin sexo puede ser una experiencia frustrante si lo que se prefiere es estar sexualmente activo. Sin embargo, un período de abstinencia puede ser una oportunidad para el crecimiento personal y el amor propio. Si bien es posible que se pierdan temporalmente los beneficios del sexo para la salud, será cuestión de tiempo para recuperarlos. Si la falta de sexo afecta una relación de pareja, las charlas íntimas o con profesionales de la salud sexual puede ayudar a comprender mejor lo que se necesita para alcanzar la satisfacción.
Vida
Día Mundial de la Salud: estrategias para mejorar la calidad de vida laboral

En el marco del Día Mundial de la Salud (7 de abril), WTW hace un llamado a las empresas de la región para priorizar la salud integral de sus colaboradores como eje estratégico para el crecimiento sostenible, la productividad y la retención del talento.
Según la Encuesta Global de Actitudes de Beneficios 2024 de WTW, que consultó a más de 45,000 empleados en 29 países (incluyendo 5,000 en América Latina), el 57% de los colaboradores en la región afirma que los beneficios proporcionados por sus empleadores satisfacen sus necesidades. Sin embargo, el estudio también advierte que el 63% de los empleados a nivel global enfrenta desafíos en al menos una dimensión del bienestar (física, emocional, financiera o social).
En América Latina, el 33% de los trabajadores asegura que los problemas económicos afectan su vida diaria, y ocho de cada diez dicen estar ahorrando menos de lo necesario para su retiro. En cuanto a salud mental, cerca de un tercio de los empleados reporta ansiedad o depresión, pero muchos no acceden a ayuda profesional, lo que resalta la urgencia de integrar apoyo emocional en los programas corporativos.
“Por ello, las organizaciones que adoptan programas de salud física, emocional y financiera, alineados a las expectativas de su fuerza laboral, no solo logran colaboradores más felices y saludables, sino también más productivos y comprometidos”, afirmó comentó René Ballo, director de Consultoría H&H LATAM de WTW.
El mensaje es claro: invertir en bienestar no es un gasto, es una ventaja competitiva. Algunas recomendaciones clave para las empresas:
- Promover una cultura que valore la salud mental y el equilibrio vida-trabajo.
- Ofrecer beneficios personalizados que consideren las diferentes generaciones en la empresa.
- Medir continuamente el impacto de las iniciativas de bienestar.
- Incluir líderes y mandos medios como embajadores del cambio cultural.
La encuesta también revela que muchas empresas están redefiniendo sus estrategias para que sus beneficios sean más inclusivos, digitales y centrados en la experiencia del empleado. Esto incluye desde la incorporación de plataformas de salud mental hasta programas financieros personalizados y esquemas de trabajo más flexibles, diseñados para responder a un entorno laboral cada vez más diverso.
WTW ha acompañado a empresas de todos los sectores en la región a construir estrategias que trascienden lo tradicional, integrando bienestar, compensación, clima organizacional y liderazgo. El resultado: entornos laborales más sanos, mayor retención de talento clave y un impacto positivo en la reputación empresarial.
En este Día Mundial de la Salud, WTW invita a las organizaciones a reflexionar sobre el impacto que tienen sus decisiones en la calidad de vida laboral y a implementar estrategias sostenibles que impulsen entornos saludables, resilientes y humanos.
Vida
Revelan un truco sencillo para prevenir la obesidad

Investigadores de Japón han propuesto un método sencillo para bajar de peso: masticar más y comer más lentamente. Ese cambio de patrones básicos podría ser una estrategia eficaz para reducir la ingesta de alimentos y prevenir la obesidad.
En un estudio publicado en la revista Nutrients, los científicos se enfocaron no solo en lo que comemos, sino también en cómo lo hacemos. Su experimento con 33 participantes sanos que comieron pizzas bajo diferentes condiciones, mostró que las mujeres tardan más en comer que los hombres, ya que mastican más lentamente y toman bocados más pequeños.
Llamativamente, cuando a los participantes se les hizo escuchar un ritmo lento de metrónomo, la duración de sus comidas aumentó significativamente. De ahí, los investigadores llegaron a la conclusión de que masticar más, tomar bocados más pequeños y crear un ambiente que fomente una alimentación más lenta, pueden ser la clave para prevenir la obesidad.
Así, en lugar de centrarse únicamente en el contenido de la dieta, determinaron que cambiar los comportamientos alimentarios para ralentizar el proceso de la ingesta podría reducir los riesgos asociados con el sobrepeso y mejorar la salud general.
«Estas son medidas sencillas que permiten ahorrar dinero y pueden implementarse de inmediato para ayudar a prevenir la obesidad», afirmó Katsumi Iizuka, de la Universidad de Salud de Fujita, quien lideró la investigación.
Nacionales
El Perico Fernández: Vida y obra del Dr. Juan José Fernández

Hablar sobre la historia de la Medicina Interna en el país, es hablar del Dr. Juan José Fernández, quien contribuyó de gran manera al desarrollo de la educación y práctica profesional de la medicina en El Salvador.
Su historia y sus aportes como médico internista han sido plasmados en un libro presentado y escrito recientemente por la Dra. Ana Beatriz Martínez de Quintanilla, especialista en Medicina Interna quien ha investigado y recopilado sobre su legado para la medicina de nuestro país. Ella fue alumna del maestro Fernández, y conocer de cerca su mística de trabajo, le inspiro hasta escribir este libro que lleva por título “El Perico Fernández: Vida y obra del doctor Juan José Fernández.
“Me siento orgullosa de presentar este libro, sobre la vida de quien fue mi maestro, que aportó tanto al desarrollo de la Medicina Interna en el país. Agradezco a la familia del doctor por todo su apoyo en esta investigación y por sus aportes. Es un libro para toda la población salvaroreña, para conocer el legado del doctor Fernández, afirmó la Dra. Quintanilla, escritora del libro.
La presentación del libro se realizó en el auditorio de la Universidad Evangélica ubicada dentro del Hospital Zacamil .En el evento estuvieron presentes familiares del doctor Fernández, médicos y personal de salud que se desempeñan en distintos hospitales de la red pública y privada.
Para los hijos del doctor Fernández fue una experiencia muy gratificante ver plasmada la historia de su padre en este libro que hoy está al alcance de la población salvadoreña, como lo afirmó el doctor José Roberto Fernández Castillo “ es emocionante que alguien escriba sobre la vidad de su padre y sobre todo por que la doctora fue exalumna, después de tanto tiempo de trabajo y después que nos compartió los documentos oficiales a la familia para que pudiéramos hacer las correcciones adecuadas y para nosotros es un sueño tener un libro de nuestro padre. El fue el impulsador de la Medicina interna en el país.”
“Es un orgullo el trabajo que ha hecho la doctora, el tiempo que ha invertido es una visión para que las generaciones futuras de los médico sepan quien era el doctor Juan José Fernández y el legado que ha dejado en toda su carrera, no solo como profesional en la medicina sino como un hombre que toda su vida tuvo experiencias también de caracter civil, como persona cristiana, como padre y como esposo. Le agradecemos en familia de todo corazón a la doctora Quintanilla por haber escrito este libro” afirmó Juan José Salvador Hernández Castillo, hijo de doctor Fernández.
Si desean adquirir el libro pueden escribir por whatsApp al número 78706357