Vida
CORONAVIRUS: Nuevo estudio muestra alta carga viral en niños pequeños

En el debate de reapertura de escuelas en algunos países del mundo, uno de los temas de conversación gira en torno a si los niños propagan o no el coronavirus.
En este episodio, el doctor Elmer Huerta habla de un estudio publicado la semana pasada en la revista médica JAMA Pediatrics y elaborado por doctores del hospital Ann & Robert H. Lurie Children’s Hospital de Chicago y de la escuela de Medicina de la Northwestern University.
En la investigación, los doctores estudiaron la carga viral de coronavirus en niños y adolescentes entre 5 a 17 años y adultos entre 18 a 65 años.
Hola, soy el Dr. Elmer Huerta y esta es su diaria dosis de información sobre el nuevo coronavirus, información que esperamos sea de utilidad para cuidar de su salud y la de su familia.
Hoy veremos cuál es el rol de los niños en el contagio de la enfermedad.
Al momento de escribir este episodio, estamos entrando ya en el octavo mes desde que se anunciara que una rara enfermedad había sido descubierta en la ciudad de Wuhan, en China.
Sin embargo, uno de los temas no plenamente aclarados es el que tiene que ver con el rol de los niños, tanto en el hecho de sufrir la enfermedad, como en su papel en el contagio del virus.
Con respecto al riesgo de enfermarse, en el episodio del 14 de mayo, describimos que los niños son capaces de sufrir la enfermedad y desarrollar una rara complicación llamada síndrome inflamatorio multisistémico de niños, la que felizmente -a pesar de tener síntomas muy dramáticos- tiene una baja mortalidad.
Por otro lado, se ha discutido mucho sobre la capacidad que tienen los niños de contagiar a los adultos, argumentándose que debido a que las escuelas han estado cerradas en muchos países, el riesgo de contagio de los pequeños a sus padres y abuelos no ha podido ser adecuadamente estudiado.
Es por eso que ––sabiendo que en muchas naciones se está discutiendo y en otras permitiendo que los niños regresen a la escuela–– es importante estudiar ese tema.
Un punto de partida sería estudiar la cantidad de virus que tienen los niños en sus fosas nasales. Ese dato podría permitir deducir -como ocurre con otras enfermedades respiratorias- que los niños pueden ser vehículos de transmisión del virus a la casa.
Varios investigadores del Hospital de Niños Ann y Robert H. Lurie de Chicago y de la Escuela de Medicina Feinberg de la Universidad Northwestern decidieron hacer un simple pero revelador estudio: comparar la carga viral en la nariz y garganta de niños pequeños, con la de niños mayores y adultos.
El estudio, publicado el 30 de julio en línea en JAMA Pediatrics, incluyó a 145 personas que empezaron a sentir síntomas dentro de la primera semana de la prueba, y se compararon tres grupos: 46 niños menores de 5 años, 51 niños y adolescentes de 5 a 17 años y 48 adultos de 18 a 65 años.
Los resultados indicaron que la cantidad de ácido nucleico viral es similar en niños mayores de 5 años y adultos, pero es mucho mayor en niños menores de 5 años, lo que -de acuerdo con los autores- indicaría que la cantidad de SARS-CoV-2 es de 10 a 100 veces mayor en el tracto respiratorio superior de los niños pequeños, comparados con niños mayores y adultos.
Los investigadores concluyen que los niños menores de 5 años con covid-19 –de leve a moderado– tienen altas cantidades de ARN viral de SARS-CoV-2 en su nariz y garganta, en comparación con niños mayores y adultos y, por tanto, los más pequeños pueden ser un vehículo importante de propagación del SARS-CoV-2 en la población general.
Sabiendo que el estudio no fue diseñado para demostrar que tener una alta carga viral indique un mayor riesgo de contagiar, existen otros ejemplos, como el del virus sincicial respiratorio, donde los niños con altas cargas virales tienen más probabilidades de transmitir la enfermedad.
Este estudio debe servir, dicen los autores, para estudiar los hábitos de comportamiento de los niños pequeños y diseñar medidas de protección a los adultos que viven en la casa, además de ayudar en los esfuerzos de vacunación, a medida que las vacunas contra el SARS-CoV-2 estén disponibles.
Nacionales
Especialista recomienda estimular la actividad física desde el gateo para un desarrollo integral en la primera infancia

Francisco Salvador Erazo, médico especialista en primera infancia del Ministerio de Salud (Minsal), destacó la importancia de iniciar rutinas para fortalecer el desarrollo psicomotor de los bebés desde que comienzan a gatear, es decir, antes de cumplir un año.
Para los menores de un año, Erazo recomendó colocar a los bebés en posición prona (boca abajo) al menos 30 minutos diarios, distribuidos en diferentes momentos, para fortalecer músculos del cuello y la espalda y así promover el gateo. Además, aconsejó evitar que los pequeños pasen más de una hora inmovilizados en hamacas o columpios.
En niños de uno a tres años, el especialista indicó que deben realizar actividades físicas durante tres horas diarias distribuidas a lo largo del día, enfatizando ejercicios que estimulen la marcha, como caminar con ayuda de los padres o arrastrar objetos. A partir de los dos años, se pueden incorporar juegos que impliquen tirar pelotas, atravesar obstáculos, correr, bailar y brincar, con el objetivo de mejorar la coordinación óculo-motora y la lateralidad.
El especialista explicó que la coordinación óculo-motora permite que el niño pueda realizar actividades combinando la vista y el movimiento, como lanzar una pelota sin necesidad de observarla directamente, lo que contribuye al desarrollo psicomotor integral.
Erazo destacó que a partir de los tres años, se recomienda que los niños realicen al menos tres horas de actividad física al día, incluyendo 30 minutos de ejercicio intenso, lo cual favorecerá su salud, autoestima y prevenirá el sobrepeso.
Ante la preocupación de falta de espacios para jugar, el especialista aclaró que no es un impedimento para estimular la actividad física en casa, dando como ejemplo a Ivania de Lagos, madre primeriza que ha convertido la sala de su vivienda en un área de juegos para su hijo Miguel, de dos años.
Ivania relató que cada mañana dedica tiempo para que Miguel realice actividades como jugar con burbujas, escalar en una estructura y bailar, promoviendo un estilo de vida saludable desde temprana edad. Además, resaltó la importancia de la lactancia materna, y agradeció la implementación de salas de lactancia materna en lugares públicos como el Aeropuerto Internacional de El Salvador.
Finalmente, la madre valoró las leyes Nacer con Cariño y Crecer Juntos, impulsadas por la primera dama Gabriela de Bukele, que promueven el bienestar integral de la niñez y las familias salvadoreñas. «Deseo que estas iniciativas lleguen a todas las familias para que más niños crezcan saludables y con amor», afirmó.
Principal
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Internacionales
Estados Unidos aprueba nuevo tratamiento inyectable para prevenir el VIH

La farmacéutica Gilead anunció este miércoles la aprobación en Estados Unidos de Yeztugo, un innovador tratamiento para la prevención del VIH que consiste en dos inyecciones al año. Este avance podría transformar la lucha contra el Virus de Inmunodeficiencia Humana y el sida, al ofrecer una alternativa a los medicamentos orales que requieren toma diaria.
Yeztugo está dirigido a adultos y adolescentes con un peso mínimo de 35 kg y se basa en la molécula lenacapavir, la misma que Gilead emplea en su tratamiento antirretroviral Sunlenca, lanzado en 2022.
Daniel O’Day, presidente y CEO de Gilead, calificó la aprobación como “un día histórico” para la prevención del VIH, destacando la eficacia sin precedentes que este medicamento promete.
No obstante, el costo del tratamiento podría limitar su acceso, ya que aunque Gilead no ha revelado precios oficiales, analistas estiman que el costo anual en Estados Unidos podría rondar los 25,000 dólares. Por ello, expertos y organizaciones internacionales han pedido al laboratorio facilitar la producción de versiones genéricas para ampliar el acceso en países de bajos recursos.