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Robbie Williams preocupa a sus fans con su reciente pérdida de peso

Al cantante Robbie Williams nunca le ha dado miedo publicar en Instagram fotografías que otras celebridades jamás permitirían que vieran la luz. A él le da igual aparecer en ropa interior, desnudo o mostrando los indicios de la calvicie que no ha conseguido frenar ni con los tratamientos más caros; si consigue arrancarle una sonrisa a sus fans, ha merecido la pena.
De cara al lanzamiento de su nuevo documental para Netflix, el antiguo componente de Take That decidió hacerse un bronceado en spray, y por supuesto, su esposa Ayda Field no pudo resistirse a sacarle una foto dentro de la carpa de plástico, con un gorro puesto y una postura bastante indigna.
En esta ocasión, lo que ha llamado la atención de sus seguidores no ha sido su falta de sentido del ridículo, sino su aspecto físico. A lo largo de los años, Robbie ha experimentado muchas subidas y bajadas de peso, relacionadas con su adicción a las drogas y al consumo de comida basura, y él mismo reconoce que ha sufrido todos los trastornos de la alimentación imaginables en un momento u otro de su vida.
Hace unos días, también reveló en una entrevista al periódico The Times que había perdido cerca de diez kilos gracias al consumo de Ozempic. Esta droga es el último método de adelgazamiento milagroso que arrasa en Hollywood, y su consumo con fines no médicos ha llegado a tal punto que hubo problemas de abastecimiento. Esto era especialmente peligroso para las personas que lo necesitan como tratamiento para la diabetes de tipo 2, y causó una gran polémica hace meses.
En el caso de Robbie, no está claro si utiliza Ozempic únicamente para perder peso. «Es como un milagro de Navidad. Y lo necesito, a nivel médico. Me han diagnosticado un caso de odio a mí mismo de tipo 2. Es terriblemente catastrófico para mi salud mental ser más grande», aseguró en su última entrevista. Pero tratándose de Robbie, es difícil saber si habla en serio, en broma, o si hay una parte de verdad en sus declaraciones.
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Sean “Diddy” Combs enfrenta veredicto por presunta red de abuso sexual y crimen organizado

El juicio contra el magnate de la música Sean «Diddy» Combs entró en su fase final este lunes, cuando el jurado recibió las instrucciones del juez Arun Subramanian y se preparó para deliberar sobre las graves acusaciones que enfrenta el fundador de Bad Boy Records.
El panel, compuesto por ocho hombres y cuatro mujeres, deberá alcanzar un veredicto unánime sobre cinco cargos: conspiración para delinquir bajo crimen organizado, trata sexual mediante fuerza, fraude o coerción, y transporte con fines de prostitución, estos últimos en relación con dos presuntas víctimas.
Durante dos meses de juicio, el jurado escuchó los testimonios de 34 testigos y analizó miles de registros telefónicos, financieros y correos electrónicos. La Fiscalía argumenta que Combs lideró durante décadas una red delictiva en la que drogaba a mujeres y las obligaba a mantener relaciones sexuales con terceros, aprovechando su poder e influencia. «El acusado nunca pensó que las mujeres de las que abusó tendrían el valor de hablar. Eso se acaba en este tribunal», afirmó la fiscal en su alegato final.
La defensa, por su parte, cuestionó la credibilidad de las denunciantes, entre ellas la cantante Casandra «Cassie» Ventura y otra expareja que testificó bajo seudónimo. Afirmaron que las relaciones eran consentidas y que las acusaciones obedecían a motivos económicos. «Combs es un empresario negro exitoso, hecho a sí mismo», alegó su abogado, quien reconoció episodios de violencia doméstica, pero negó los cargos de crimen organizado.
El acusado, de 55 años, no testificó ni presentó testigos, una estrategia legal común en procesos penales en Estados Unidos. Si es hallado culpable, podría enfrentar cadena perpetua.
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«F1» conquista la taquilla y se convierte en el mayor estreno de Apple en cines

La película F1, una producción de Apple Original Films en asociación con Warner Bros., se ha convertido en el mayor estreno en salas de cine para una producción de Apple, marcando un hito en la incursión de la compañía en la industria cinematográfica.
El filme, que ya está disponible en todas las salas de cine de El Salvador, ofrece una experiencia inmersiva para fanáticos y curiosos del automovilismo, con la participación de pilotos reales y monoplazas auténticos de la Fórmula 1. La leyenda del deporte, Lewis Hamilton, asumió personalmente los costos de distribución y promoción a nivel internacional.
Durante su primer fin de semana en cartelera, F1 superó a producciones similares como Ford vs Ferrari, que recaudó $31.4 millones, y Days of Thunder, con $15.4 millones.
En plataformas especializadas, la película ha recibido una positiva acogida: en IMDb cuenta con una calificación de 7.9 basada en 38,000 votaciones, y en CinemaScore obtuvo un 92 % de aprobación del público.
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Miles celebran en Seúl el estreno de la última temporada de «Squid Game»

Miles de fanáticos de la exitosa serie surcoreana «Squid Game» («El juego del calamar») se reunieron este sábado en el centro de Seúl para celebrar el lanzamiento en Netflix de la tercera y última temporada.
La popular distopía, que retrata una sociedad marcada por la violencia y las desigualdades, se estrenó en 2021 y se convirtió en la serie más vista de la plataforma. El viernes se lanzó su temporada final, y los seguidores lo festejaron cerca del emblemático palacio Gyeongbokgung, disfrazados con los característicos uniformes de los «agentes» enmascarados que aparecen en la historia.
La celebración incluyó participantes con cartas «ddakji», un tradicional juego coreano presente en la trama, y banderas con los símbolos icónicos del círculo, triángulo y cuadrado. La Biblioteca Metropolitana de Seúl fue iluminada con imágenes y personajes de la serie, incluida la gigante muñeca Young-hee.
El director Hwang Dong-hyuk expresó recientemente que dio «todo» por la serie y aunque siente tristeza por su final, también experimenta alivio.
La superestrella Lee Byung-hun, quien interpreta al enigmático líder de la competencia, destacó que «Squid Game» se ha convertido en un fenómeno cultural que ha marcado un hito en la creación surcoreana.
El evento fue parcialmente organizado por la Municipalidad de Seúl, que busca aprovechar el fenómeno global para promover el turismo local.
Entre los asistentes, la influencer Snitchery, proveniente de Los Ángeles, confesó que no quería irse, mientras que el fan Park Sang-gyu resaltó que la serie «es, sobre todo, una historia sobre las personas y refleja muchos aspectos de la vida real, no solo sobre los juegos».